La aerolínea filial del grupo Lufthansa registró en el primer trimestre unas pérdidas en el beneficio operativo de 24 millones de francos suizos (19,3 millones de euros), seis veces más que en el mismo período de 2012, cuando se dejó 4 millones de francos suizos (3,2 millones de euros), según informó la compañía este viernes en un comunicado.
A pesar del aumento de las pérdidas derivadas de la combinación de «factores exógenos negativos y una situación de mercado todavía desfavorable», la cifra de negocio trimestral de Swiss ascendió a 1.191 millones de francos suizos (958,4 millones de euros), lo que representa una mejora del 2% con respecto al mismo período del ejercicio anterior.
La aerolínea explicó que los mercados «continúan sin mostrar signos de recuperación» al tiempo que «los gastos de Swiss en combustible sufren un desproporcional aumento año tras año».
Respecto a los costes, el queroseno ocupa una de las primeras posiciones, por lo que Swiss seguirá trabajando en optimizar la gestión de combustible.
No obstante, el consejero delegado de Swiss, Harry Hohmeister, destacó que gracias a la «rigurosa disciplina de costes y las medidas» emprendidas por la compañía, «el resto de partidas de gastos se mantienen prácticamente estables e incluso han mejorado».
En este sentido subrayó que se ha incrementado la producción durante el período, aunque reconoció que deberán «dirigir todavía más sus esfuerzos «todavía más» con el fin de recuperar nuestras ganancias a los niveles que necesitamos para asegurar la continuidad del desarrollo sostenible de Swiss».
En cuanto al tráfico de pasajeros, más de 3,61 millones de usuarios volaron con Swiss hasta marzo, una cifra similar al registrado en los tres primeros meses de 2012.
El coeficiente de ocupación alcanzó el 79,6%, lo que supone una mejora de 1,8 puntos porcentuales, mientras que el número de vuelos operados disminuyó un 4,5%, hasta los 35.722 vuelos.
OPTIMIZACION DE COSTES.
Por el momento, Swiss señaló que continuará realizando optimizaciones de costes y «buscando nuevas fuentes de ingresos», como parte del programa ‘Score’ del grupo Lufthansa.
Entre las medidas a implementar, se encuentran el rediseño de su organización y sus operaciones de vuelo en el aeropuerto de Ginebra, para cuya nueva base de tripulación, que contará con 150 miembros de tripulación de cabina y 90 pilotos, se ha puesto en marcha un proceso de contratación.
De cara a los próximos meses, Swiss prevé que el mercado y el entorno de ganancias se mantengan «difíciles» durante 2013, aunque igualmente espera un mayor volumen de pasajeros e ingresos, y espera un resultado operativo en línea con los niveles alcanzados en el ejercicio anterior, cuando ingresó 171 millones, un 31% menos.
De cara al futuro, SWISS prevé que el precio medio del billete no se recupere «a corto plazo» y anticipó una gran volatilidad en la demanda, así como efectos negativos derivados de los precios de las materias primas y de los tipos de cambio. Unos aspectos negativos que podrían verse compensados por la fortaleza de la demanda consolidada del mercado suizo, la evolución del mercado de carga y del largo radio.
