TENDENCIAS

Iberia exige al Principado que cese en las «infundadas» críticas a sus precios

La dirección de Iberia exige por escrito al Gobierno regional que «cese» en sus críticas a los precios de los billetes y al servicio que presta la compañía en Asturias, al entender que no se ajustan a la realidad, «dañan gravemente» su imagen y le causan un «perjuicio injustificable». Así consta en una carta remitida por el director comercial de Iberia, Marco Sansavini, a la titular de Fomento del Principado, Belén Fernández, misiva que ayer por la tarde aún no había llegado a la Consejería. Fernández se reserva cualquier valoración hasta conocer el contenido exacto de la comunicación del alto ejecutivo de Iberia.

Además de censurar la polí­tica de precios, los horarios y las frecuencias, el Gobierno de Javier Fernández estudia la posibilidad de denunciar a Iberia ante la Comisión Nacional de la Competencia por un presunto abuso de su posición dominante en la ruta con Madrid, operada en solitario desde la salida de Ryanair, y ha solicitado al Ministerio de Fomento -sin éxito- que declare este corredor como obligación de servicio público, fijando precios máximos para unos billetes que, en algunos casos, han superado los 500 euros para viajes de ida y vuelta en el día. Además de por el Ejecutivo regional, el comportamiento de Iberia en Asturias ha sido criticado con suma dureza por la Federación Asturiana de Empresarios (FADE) y por la Unión de Consumidores de España (UCE), que ha presentado una reclamación en Competencia.

En su misiva, Marco Sansavini asegura que los precios de Iberia para volar desde Asturias a Madrid son «similares» a los del resto de aeropuertos del Norte de España y niega que se hayan incrementado desde la salida de Ryanair, para aprovechar que opera el corredor en solitario. «Es radicalmente falso: las tarifas no han sufrido ninguna modificación distinta a la de otros aeropuertos de nuestra red», afirma.

Según el director comercial de la compañía, la tarifa media de Iberia en la región es de 101 euros (tasas incluidas) y está por debajo de la media en los aeropuertos del Norte de España. Es más, afirma que los billetes oscilan entre los 45 euros de los más baratos y los 368 euros de los más caros. Responden, según Sansavini, a «los costes de la compañía y a la situación de la demanda».

Tras poner de manifiesto estos datos, el directivo de la aerolínea subraya el «malestar» de Iberia ante las «infundadas» declaraciones del Gobierno regional y lamenta que lance «acusaciones» en lugar de valorar que Iberia sea la única compañía que lleva 45 años ininterrumpidos volando desde Asturias, «sin ningún incentivo económico y «frente a otras aerolíneas que han volado únicamente cuando han recibido subvenciones».

«Iberia está actualmente acometiendo un profundo proceso de reestructuración para poder ser rentable y sostenible, con sustanciales rebajas salariales, mejoras de productividad y reducción de plantilla en más de 3.000 personas. En este contexto, la compañía entiende que las desafortunadas declaraciones del Gobierno del Principado hacen mucho daño a la empresa y a todos sus trabajadores, y más en una situación económica como la actual, por lo que ruega que cesen», comunica Iberia en una nota pública en la que da cuenta de la carta de Marco Sansavini.

Iberia se quedó sola en la ruta con Madrid después de que Ryanair decidiera dejar de operar desde Santiago del Monte coincidiendo con el inicio de la campaña de verano, aludiendo a la subida de las tasas aeroportuarias y al escaso interés del Principado para firmar un convenio de colaboración. Sin embargo, esta circunstancia no se ha traducido en un incremento del número de pasajeros para la compañía española, que, muy por el contrario, cerró la ruta Asturias-Madrid en abril con menos pasajeros de los que tuvo en el mismo mes del pasado año y, además, con una menor ocupación media en sus aviones.

En concreto, Iberia sumó el mes pasado 27.800 viajeros en el corredor con Madrid, cuando justo un año antes, y en competencia con Ryanair, había tenido 28.495 pasajeros. La ruta con la capital de España perdió en total 17.578 usuarios en ese balance interanual, casi la mitad de los que tenía.

La salida de Ryanair y los recortes de Iberia hicieron que el aeropuerto sufriera en abril un batacazo histórico en número de viajeros, con una caída del 24% respecto a 2012. Con 83.411 usuarios, Santiago del Monte se ha visto superada por la terminal cántabra de Parayas, que se sitúa como tercer aeródromo de la Cornisa, aprovechando una extensa programación de vuelos de Ryanair por los que su Gobierno regional paga 4 millones al año.

Compartir noticia:
ANUNCIOS
SÍGUENOS
Biblioteca Virtual