Luego de que sus colegas de American Airlines señalaran a la azafata Louann Giambattista de llevar ratones bajo su ropa interior en un vuelo internacional, dicha tripulante ha demandado a la compañía por los perjuicios que le ha ocasionado.
Dos reportes de sus colegas señalaron que Louann estaba alimentando a un ratón y de ver un bulto en uno de sus bolsillos algo que «parecía ser una mascota viva». Cuando el asunto llegó a manos de los inspectores, los agentes buscaron por más de una hora en su equipaje, pero no hallaron al roedor.
Tras las acusaciones, el nombre de Giambattista quedó marcado por los clientes por más de un año, lo que le ha originado una ansiedad debilitante y estrés postraumático.
