TURISMO

Cuando volar como las aves se transforma en la mejor manera de disfrutar Colombia

Es conocido que una buena vista en altura da la posibilidad, a quienes visitan por primera vez un lugar, de disfrutar de hermosas postales que difícilmente se podrían apreciar desde tierra firme. ¿Cómo sería mirar las montañas, cafetales, naturaleza virgen y hermosos pueblos de arquitectura colonial bajo la misma perspectiva de las aves? Esa es la nueva experiencia que propone Colombia: Un hermoso paseo en globo aerostático por las Rutas Cafeteras más importantes del país.

Elevarse a cientos de metros, sin el ruido de un motor, con una agradable brisa y con el solo efecto que produce la física al levantar un globo con aire caliente, crea una atmósfera y sensaciones únicas, que cualquier turista que visite Colombia no podrá olvidar.

Es así como el paseo, de unos 45 minutos, integra los paisajes donde se cultiva el café, declarados Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, un interesante atractivo no sólo para los locales, sino también para los extranjeros que pueden conocer una parte de Colombia de una manera diferente y vivir una experiencia turística muy novedosa.

Con una capacidad por cesta de cuatro adultos más el piloto, los vuelos tienen su salida a las seis de la mañana, que es cuando se dan las mejores condiciones atmosféricas, desde las proximidades del Parque Nacional del Café en Montenegro, en el departamento de Quindío, ubicado en el corazón de Colombia, a unos 300 kilómetros de Bogotá, lugar dedicado a la transmisión de la cultura cafetera.

Emplazado en doce hectáreas de extensión, el Parque alberga un museo dedicado a la cultura cafetera, una finca productiva donde se cultivan varias especies de café y se explica detalladamente todo el proceso productivo, además de una reserva natural para la protección y exhibición de especies endémicas.

El parque ofrece además varias opciones de transporte interno, algunas de las cuales son representaciones de las maneras como se transportaba el café en otras épocas: encomiendas tiradas por caballos, ferrocarriles con estaciones construidas a imitación de las tradicionales e incluso cuenta con teleférico que permite ver desde arriba los cultivos de café. Todo esto, además de los hermosos parajes naturales de este eje cafetero rodeado de montañas, con casas patronales de casi 130 años y que sirven de hospedaje para que el visitante aprenda todo acerca de las labores agrícolas y el proceso del grano, completan el maravilloso espectáculo que puede disfrutarse desde las alturas.

La experiencia incluye la participación en el inflado del globo, café de cosecha, desplazamientos en 4×4, certificado de vuelo, reportaje fotográfico, seguro de vuelo y un rico desayuno típico de la región.
Sin duda, un viaje de ensueño para atesorar por siempre, donde el país cafetero invita a turistas nacionales y extranjeros a disfrutar desde las alturas, porque Colombia es Realismo Mágico.

Para obtener más información visite: www.globoscolombia.com y http://www.rutasdelpaisajeculturalcafetero.com/

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