Tomás Huamán Quispe, de 70 años, termina de recoger su cosecha de papas en la parte trasera de su casa. A menos de cien metros se ve una inmensa pampa, lugar donde en unos meses se debería iniciar la construcción del aeropuerto internacional de Chinchero, en Urubamba, a 30 kilómetros del centro de la ciudad del Cusco.
A mediados de mes, el ministro de Transportes y Comunicaciones (MTC), Martín Vizcarra, explicó en el Congreso que un equipo de profesionales de su sector, del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y de Pro Inversión, se encuentra evaluando el esquema de endeudamiento presentado por el consorcio Kuntur Wasi, empresa que se encargará de la construcción del aeropuerto y que lo tendrá en concesión por 40 años.
La aprobación de ese esquema es el paso previo para la autorización de inicio de obras. "La inversión que se va a hacer es de US$538 millones, y si es que se aprueba, como esperamos todos, en el cuarto trimestre de este año se podrían empezar ya las obras del aeropuerto", anunció Vizcarra.
El aeropuerto de Chinchero reemplazará al aeropuerto internacional Velasco Astete (ubicado en la ciudad del Cusco) y recibirá a 6 millones de pasajeros al año. Es decir, tendrá casi el doble de capacidad que el actual terminal aéreo cusqueño."El Velasco Astete recibió en el 2015 a 3,2 millones de visitantes, está ya al límite de su capacidad", afirmó Eduardo Sanz, gerente regional del Gobierno Regional de Cusco.
Agregó que por la demanda y el tráfico aéreo de los vuelos que entran y salen del Cusco, estos tienen aproximadamente 40 minutos de retraso.
"Le hemos pedido al ministro Vizcarra que priorice este proyecto", aseguró. "Es estratégico, ya que mejorará la conectividad aérea en el país, pero también traerá beneficios para el destino turístico Cusco-Machu Picchu, que tiene mejor percepción en el extranjero que el destino Perú", refirió Carlos Milla, presidente de la Cámara de Turismo del Cusco…
