El sector turístico español ha tomado con reserva el anuncio de expansión de Airbnb, portal de alquiler de alojamientos vacacionales que presentó el pasado jueves sus planes para dar el salto al ámbito de los viajes.
El anuncio de la popular aplicación llega a España en un momento difícil por la crisis, en el que 5.000 agencias de viajes han desaparecido en estos años. Para algunos expertos, en la recuperación comercial ha contribuido de forma destacable la tecnología incorporada al turismo y, en ese sentido, Airbnb llega lleno de ideas.
"La idea aporta dosis de imaginación y estimula la creación de nuevos productos», reconoció el vicepresidente de la patronal turística Exceltur, José Luis Zoreda.
Incluso "hay hueco para quienes quieren plantear otras estrategia", según el vicepresidente de área económico financiera de la Confederación Española de Agencias de Viajes (Ceav), Martín Sarrate.
El problema radica en la legalidad. Airbnb quiere ampliar su campo de actuación en el turismo, pero su negocio hasta ahora ya venía rodeado de controversia. "Si van a vender viajes combinados deben darse de alta en las correspondientes comunidades autónomas y cumplir con la legislación de la Unión Europea (UE)", comentó Sarrate sobre un portal que asociaciones hoteleras como Cehat han calificado de oferta "ilegal" que se ha institucionalizado.
No obstante, "no es diferente de lo que hacen otros operadores online, como Expedia, Rumbo o Atrápalo", y éstos cumplen la legalidad, indicó Zoreda…
