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El material que hace a los aviones más ligeros

El Instituto Tecnológico Valenciano del Plástico, Aimplas, ha sido el escenario de la creación de un nuevo material ecológico aplicado a la industria aeronáutica. El nuevo compuesto se utilizará para la fabricación de piezas interiores de aviones, aunque su uso puede extenderse a otros medios de tranporte como autobuses o trenes. Éste tiene componentes biodegradables y un refuerzo de fibra de lino. El material se ha desarrollado dentro del proyecto denominado «Cayley», liderado por Sergio Fita, el investigador principal. El resultado de esta investigación son unos paneles ecológicos más ligeros y ecológicos que los utilizados actualmente.

La innovación en este proyecto viene de la mano del compromiso ecológico y el respeto al medio ambiente. Algunos de los componentes de las piezas son completamente biodegradables, y, además, los paneles se fabrican con materiales extraídos de fuentes renovables, lo que asegura su independencia respecto al petróleo, el compuesto base de casi todos los plásticos.

Los paneles ecológicos desarrollados por «Cayley» destacan porque son mucho más ligeros que la fibra de vidrio "žel material que más se utiliza para avione"ž pero igual de robustos. La disminución del peso de las piezas hace que el avión consuma menos combustible, y que, en consecuencia, emita menos CO2 y contamine menos. En concreto, el nuevo material es un 60 % más ligero que la fibra de vidrio, según los datos de los investigadores.

El nuevo compuesto también resulta más fácil de reciclar que los convencionales. Gracias a él, los investigadores esperan que se reduzca en más de 100 toneladas los residuos de la industria aeronáutica al año.

Este compromiso ecológico también supone ahorro económico. Además de la disminución del consumo de carburante por parte de los aviones, las piezas con este material serán más baratas. En «Cayley» han logrado reducir el número de pasos en el proceso de creación "žes más rápido de fabricar"ž y esto supondrá un menor precio.

Hasta ahora el material más utilizado para el interior de los aviones, trenes y autobuses es la fibra de vidrio, un material procedente de fuentes no renovables. En el caso de los aviones se utilizan las procedentes de resinas fenólicas, y en el de los aviones, resinas de poliéster. «Ambos materiales se sacan del petróleo» afirma Sergio Fita. La sustitución de las resinas térmicas también supone una reducción de la peligrosidad, pues estos materiales son altamente inflamables. El nuevo material es resistente al fuego.

Estas innovaciones ecológicas son claves para el desarrollo de la industria aeronáutica a nivel mundial con la problemática medioambiental existente. Pero el material no se aplicará hasta dentro de algún tiempo. «Los procesos de validación para los materiales de los aviones son muy largos, esperamos de tres a cinco años» asegura Fita. Así, el nuevo compuesto está en proceso de patente y no tiene un nombre asignado, de momento.

El proyecto «Cayley» también ha sido largo, pues parte de una iniciativa inicial del CDTI, que se desarrolló durante tres años. Después se amplió con el proyecto europeo Eco-innovation. En él han participado centros de investigación tecnológica de Alemania (Inent), de Bélgica (Lineo) y de Madrid (Boeing), pero el desarrollo ha sido culminado por Sergio Fita en Valencia. El investigador ha contado con el apoyo de otros siete investigadores del Instuto Tecnológico del Plástico, Aimplas, que han ido trabajando en diferentes componentes del material final.

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