La Aeronáutica Civil, quien volvió a retomar la operación pública del Aeropuerto Ernesto Cortissoz de Barranquilla el año anterior, resaltó que se encuentra trabajando de cara a los próximos años para garantizar que cada despegue y aterrizaje desde este terminal de transporte sea realice con seguridad y confiabilidad para los usuarios.
En ese sentido, mencionó que en una primera fase hasta 2026, se destinó alrededor de 86.000 millones de pesos en obras y contratos para mejorar la infraestructura y los servicios del aeropuerto.
Estas inversiones pretenden atender necesidades urgentes en áreas como sistemas eléctricos, iluminación, ayudas visuales para la seguridad aérea, cerramiento perimetral, mantenimiento de pista y plataformas, estación de bomberos, zonas verdes y servicios sanitarios, entre otros.
La operación se planteó en dos fases. La primera fase, entre septiembre y diciembre de 2024, abordó intervenciones prioritarias para asegurar la continuidad del servicio y la seguridad operacional.
En la segunda fase, actualmente en ejecución, se adelantan contratos de mantenimiento y mejoramiento tanto en el lado aire (pistas, calles de rodaje, ayudas visuales y cerramiento) como en el lado tierra (terminal de pasajeros, baños, salas de equipaje y zonas de acceso). Estas acciones garantizan la prestación del servicio con estándares más altos de calidad y eficiencia.
En paralelo, la Aerocivil informó que adelanta inversiones en tecnologías y servicios que hacen más inclusiva y accesible la experiencia de los usuarios, incluyendo mantenimiento de equipos electromecánicos, mejoras en iluminación, modernización de sistemas de comunicación, seguridad aeroportuaria y estudios para la construcción de una base de búsqueda y salvamento (SAR)…