Aeroméxico se encuentra utilizando IBM Environmental Intelligence Suite, una tecnología para monitorear, anticipar, planear y responder ante el potencial impacto de los eventos meteorológicos extremos en las operaciones aéreas, elevando los niveles de seguridad y eficiencia en beneficio de sus clientes y colaboradores. La tecnología fue implementada por Xatrix, la compañía mexicana de consultoría y asociada comercial de IBM.
La tecnología, impulsada por inteligencia artificial, permite a la aerolínea realizar mejores análisis de riesgos climáticos, proporcionando información meteorológica y datos geoespaciales para las más de 100 rutas que opera en México y el mundo. Asimismo emite alertas que permiten considerar las condiciones actuales y previstas como el viento, lluvias y rayos, entre otros fenómenos, para mejorar las decisiones operativas en su planeación de vuelos.
Las condiciones climáticas adversas que afectan los negocios están en aumento y, de hecho, en el Informe sobre los riesgos globales 2023 del Foro Económico Mundial, se contempla que los fenómenos meteorológicos extremos y desastres naturales son el segundo riesgo de más alto impacto en los próximos años.
“El futuro de los negocios y el medio ambiente están profundamente conectados, y la tecnología permite una mayor comprensión del clima y cómo puede impactar a las empresas”, señaló Manuel González del Yerro, Líder del Software de Sostenibilidad para IBM Latinoamérica. Y agregó “Para nosotros es un orgullo que Aeroméxico confíe en las tecnologías de IBM para gestionar el riesgo climático, anteponiendo la seguridad y la eficiencia por encima de todo y anticipándose para reaccionar ante los eventos atmosféricos adversos.”
Diego Convalia, Vicepresidente de Operaciones en Vuelo Técnico de Aeroméxico comentó: “El uso de esta tecnología complementa la de los aviones más modernos como los que tenemos, la pericia de nuestras tripulaciones y la tecnología y servicios de control de tránsito aéreo de los países donde operamos.” Y continuó: “Esta tecnología nos ayuda en las decisiones para los despegues, aterrizajes, las rutas de vuelo y las operaciones en tierra, lo que contribuye a que sigamos elevando el vuelo hacia una experiencia extraordinaria.”