Desde este lunes, y con el fin de garantizar el mejor nivel de seguridad sanitaria, Air France desplegará progresivamente un dispositivo de control de temperatura a la salida de todos sus vuelos. Esta comprobación sistemática se realizará con termómetros infrarrojos sin contacto.
Para viajar será necesario tener una temperatura inferior a 38°C. A los clientes con una temperatura superior se les podrá denegar el embarque y su reserva será modificada sin gastos para una salida posterior.
Desde el lunes, es obligatorio también llevar mascarillas en el conjunto de los vuelos operados por Air France, en aplicación de la consigna del estado francés de obligatoriedad de llevar mascarilla en los transportes.
Se informará a los clientes, antes de su viaje, acerca de estas nuevas disposiciones a través de todos los canales de comunicación (email, sms, páginas web).
Estas medidas vienen a completar el dispositivo puesto en marcha por Air France y sus socios para responder a la crisis sanitaria de la COVID-19. Estas son las medidas principales:
- Obligatoriedad de llevar mascarillas para el conjunto de los miembros del equipaje y de los agentes en contacto con los clientes.
- Reorganización del recorrido de los clientes en tierra con aplicación de la distancia física a lo largo de todo el recorrido en el aeropuerto e instalación, siempre que es posible, de mamparas de protección de Plexiglas en los aeropuertos.
- Aplicación de medidas de distancia física a bordo siempre que sea posible. En la mayoría de los vuelos, los bajos índices de ocupación permiten actualmente dejar espacio entre los clientes. En los casos en los que no es posible, el uso de las mascarillas por parte del conjunto de los pasajeros y de la tripulación garantiza la protección sanitaria adecuada.
- Refuerzo de los procedimientos diarios de limpieza de los aviones, con la desinfección de todas las superficies en contacto con los clientes tales como los reposabrazos, las mesitas plegables o las pantallas.
- Puesta en marcha de un procedimiento específico periódico de desinfección de los aviones con la pulverización de un producto virucida homologado cuya eficacia tiene una duración establecida para diez días.
- Adaptación del servicio a bordo para limitar la interacción entre los clientes y los miembros de la tripulación. En los vuelos domésticos franceses y los vuelos cortos en Europa, se han suspendido los servicios de restauración y bebidas. En los vuelos de largo alcance el servicio en cabina se limita y se da prioridad a los productos envueltos en film o individualmente. Tampoco se puede ofrecer la venta de artículos libres de impuestos ni la distribución de prensa en formato papel a bordo de los aviones. La oferta de prensa y revistas sigue disponible, de manera gratuita, a través de la aplicación Air France Play, y se puede descargar antes del vuelo.
Además, el aire en la cabina de los aviones de Air France se renueva cada 3 minutos con filtros “High Efficiency Particulate Air” (HEPA), idénticos a los utilizados en quirófanos. Estos filtros extraen más del 99,99% de los virus más pequeños, incluidos aquellos cuyo tamaño no supera los 0,01 micrómetros, lo que garantiza la conformidad del aire de la cabina con los estándares de calidad. Los virus de tipo coronavirus, cuyo tamaño va de los 0,08 a 0,16 micrómetros, son filtrados por los filtros HEPA.
Para Air France, la salud y la seguridad de sus clientes y su personal constituye un imperativo absoluto. Todo el personal de la compañía está movilizado para garantizar a sus clientes el mejor nivel de seguridad sanitaria y garantizarles un viaje tranquilo.