El Príncipe heredero del Reino de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, anuncia oficialmente la creación de Riyadh Air (RIA) como línea aérea nacional. Impulsada por fondos de inversión pública, la compañía pretende convertirse en un nuevo actor de alcance global.
Con una flota conformada por más de 400 aviones que se vienen negociando con Airbus y Boeing, Riyadh Air forma parte del programa político del Príncipe, Vision 2030. El proyecto busca transformar la economía saudita y posicionar al Reino en el mundo moderno. Al igual que otros países árabes, este tipo de iniciativas reconoce el rol de la aviación como parte de un pilar fundamental en el desarrollo de los países, razón por la cual se justifica la inversión pública en una línea aérea.
Para 2030, Riyadh Air espera conformar una red de 100 destinos en todo el mundo. La mayor parte de estos se concentrarán en el Medio Oriente, Europa, Asia y África. A mediano plazo, no se descarta que también pueda atender destinos en otras regiones como Norteamérica o incluso Sudamérica. El proyecto de la nueva empresa aerocomercial está en línea con el anuncio de la expansión del aeropuerto de la capital saudita.
Como nueva línea aérea nacional, Riyadh Air espera ser un competidor fuerte con Emirates, Etihad, Qatar Airways y Turkish Airlines. Uno de los objetivos de la empresa es crear una nueva era de viajes y facilitar el turismo en Arabia Saudita. En ese sentido, es altamente probable que en las estrategias comerciales de la línea aérea se incluyan stopovers que permitan visitar unos días el Reino para los pasajeros que viajen en conexión. Algo similar a estrategias que antes adoptan Air France, Copa Airlines, Emirates o Qantas, entre otras.
El Reino de Arabia Saudita espera que Riyadh Air aporte alrededor de US$20 mil millones al Producto Interno Bruto (PIB) y genere alrededor de 200.000 puestos de trabajo directos e indirectos.
¿Por qué no invertir en Saudia?
Saudia es actualmente la línea aérea nacional del Reino de Arabia Saudita. Además, de ser la principal y la más antigua, por lo que es la más conocida comenzando por su nombre que es todo un emblema del Reino.
Actualmente, Saudia está en plena transformación de su producto para ser una compañía alta altamente competitiva en los mercados internacionales. Al parecer, coexistirá con la nueva empresa estatal lo que de confirmarse lleva a entender que las dos son parte del proyecto nacional Vision 2030.
La decisión de Riyadh Air apunta a crear una línea aérea estrictamente para aportar conexiones internacionales. Saudia por su parte, busca atender al pasajero local o que tiene como destino Arabia Saudita.
Pese a su positiva transformación, Saudia tiene la desventaja de operar en dos ciudades relevantes: Jeddah y Riyadh. Además, también tiene una oferta específica desde otros puntos como Medina, Damman u otras ciudades. Por la dispersión de sus operaciones, la programación de vuelos se divide en general entre ciudades, especialmente, Jeddah y Riyadh. Por ejemplo: cuatro vuelos por semana a una y tres a la otra, lo que resta valor al pasajero que busca contar la mayor cantidad de frecuencias (ideal vuelo diario al destino).
En el caso de proceder a desarrollar simultáneamente a sus dos ciudades como hubs altamente competitivos, debe duplicar la flota para elevar las operaciones. De esta forma no alteraría ninguno de los mercados que atiende…
