Veinte meses demoraron las obras en el Aeropuerto Carriel Sur, el cual, el pasado jueves volvió a operar con el sistema de aterrizaje instrumental ILS3, para mantener la seguridad de los aviones cuando hay baja visibilidad.
Las obras se iniciaron en mayo de 2021 y se llevaron a cabo en dos etapas gracias a una inversión de $18 mil millones del Ministerio Obras Públicas. En ellas se consideró, entre otros aspectos, el carpeteo de la pista central, la normalización de la franja de seguridad y el cambio de espesor del pavimento.
Según reveló el diario El Sur, con estos trabajos se espera que las aerolíneas vuelvan a implementar rutas internacionales desde el terminal, tal como ocurrió en 2019 con el trayecto Concepción-Lima, y que este aumente sus operaciones las cuales alcanzaron las 35 mil durante el año pasado –superando las 23 mil registradas en 2019.
Hernán Gormaz, director regional de Aeropuertos calificó el hito como una excelente noticia «toda vez que ya se encuentra operativo el sistema ILS3, que permite el aterrizaje con escasa visibilidad. Ello facilitará operaciones mucho más seguras en Carriel Sur, de tal forma que la operación de las líneas aéreas sea bajo mejores estándares de seguridad».
Además, comentó que las «mejoras sustanciales permitirán potenciar aún más el retorno de la internacionalización del Biobío como terminal aéreo tanto para vuelos comerciales como para vuelos de carga».
Gormaz puntualizó en la importancia de «avanzar en todo lo que significa el trabajo multisectorial que debe estar presente en el aeropuerto. Por esa razón está en desarrollo un plan de trabajo integrado por los aeródromos de Isla Mocha, María Dolores y Carriel Sur, pues entendemos que debe ser parte de una estrategia regional, en materia de proyección internacional, sobre todo para fortalecer el intercambio comercial»…