A través de una inversión de US$ 600 millones, el condado de Miami-Dade aprobó la construcción de la nueva Terminal K en el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA). Se trata de una expansión clave, en el marco del plan de modernización “Future-Ready Modernization in Action”, valorado en US$ 9 mil millones.
Esta obra representa el primer crecimiento de terminales desde 2007 y marca un punto de inflexión para uno de los aeropuertos más transitados del mundo. Con 56 millones de pasajeros movilizados y más de 3 millones de toneladas de carga movidas solo en 2024, MIA se encuentra al límite de su capacidad operativa.
El nuevo proyecto busca anticiparse al futuro: el objetivo es preparar el aeropuerto para manejar hasta 77 millones de pasajeros y 5 millones de toneladas de carga en 2040.
¿Cómo será la Terminal K? Sumará seis nuevas puertas de embarque con contacto directo; una nueva plataforma de estacionamiento para aeronaves; sistema de hidrantes de combustible para abastecimiento más eficiente; instalación de dos nuevos carruseles de recogida de equipaje; mejoras en el sistema de manejo de equipaje, conectando las terminales Central y Sur; una instalación de mantenimiento para equipos de soporte en tierra; y certificación LEED Silver para asegurar una construcción sostenible…