Durante varias horas, un avión de la compañía Air Astana ha tenido en alerta a Portugal este fin de semana. Los hechos ocurrieron este domingo a las 14:00 horas cuando el aparato sufrió un fallo en su sistema de control que afectó a los mandos de aterrizaje en plena tormenta de agua y viento, lo que le imposibilitó aterrizar en el aeropuerto de Lisboa.
El avión, fuera de control, sobrevoló durante varios minutos la zona a baja altura y en busca de mejores condiciones para llegar a tierra. Dos F-16 de las Fuerzas Armadas de Portugal fueron movilizados y acompañaron a la aeronave hasta Beja, a 180 kilómetros al sudeste de Lisboa, donde aterrizó al segundo intento.
Durante varias horas, un avión de la compañía Air Astana ha tenido en alerta a Portugal este fin de semana. Los hechos ocurrieron este domingo a las 14:00 horas cuando el aparato sufrió un fallo en su sistema de control que afectó a los mandos de aterrizaje en plena tormenta de agua y viento, lo que le imposibilitó aterrizar en el aeropuerto de Lisboa.
El avión, fuera de control, sobrevoló durante varios minutos la zona a baja altura y en busca de mejores condiciones para llegar a tierra. Dos F-16 de las Fuerzas Armadas de Portugal fueron movilizados y acompañaron a la aeronave hasta Beja, a 180 kilómetros al sudeste de Lisboa, donde aterrizó al segundo intento.
El aparato, con capacidad para 120 personas y con bandera de Kazajistán, viajaba sin pasajeros y solo con seis tripulantes. No hay ningún herido.
Había salido del aeropuerto de Alberca donde, según publica el periódico ‘Correio da Manha’, recibió asistencia técnica. Su objetivo era regresar a Kazajistán pero los problemas técnicos le obligaron a avisar a la torre de control, que tenía previsto incluso un amerizaje…