Un joven acusó a través de redes sociales a una aerolínea de maltrato animal; afirmó que su can permaneció varias horas encerrado en una bodega y tuvo que pagar un monto extra para que finalmente se lo entregaran.
Mediante su cuenta de Facebook, Felipe Lomelín relató que el sábado 7 de febrero, un amigo le envió por Aeroméxico Carga a su mascota, desde Playa del Carmen a San Luis Potosí.
Agregó que el personal de mostrador de la empresa le informó a su amigo que el can llegaría aproximadamente a las 18:00 horas al Aeropuerto Internacional Ponciano Arriaga. " Se registró el envío y nos dijeron que en la escala de la ciudad de México le iban a dar de comer, (yo lo mandé con su bolsita de comida)".
El denunciante dijo que llegó al aeropuerto de San Luis Potosí a las 17:30 horas y en el mostrador de Aeroméxico le informaron que no había llegado ningún perrito.
"Obviamente pregunté que me ayudaran a identificar por el número de guía o si no tenían algún registro de mi perro. A lo que olímpicamente el personal de Aeromexico me dijo que no era su problema y que ellos eran una empresa ajena a Aeromexico Carga"¦ Pero disculpen, a nosotros los clientes, no nos importa si esas dos empresas son diferente".
Se quejó de la indiferencia del personal de la aerolínea y denunció que la gerencia del aeropuerto no estaba presente por ser fin de semana. "Si hubiera sido un paquete normal pues no hacemos problema. Pero estamos hablando de un ser vivo".
En su denuncia, el propietario del can dijo que por sus propios medios se enteró que Aeroméxico tiene una bodega a las afueras del Aeropuerto; "fui a asomarme y estaba cerrado con un letrero de horario de atención de Lunes a Viernes de 8:00 a 6:00 pm, y sábados medio día, volvían a abrir hasta el lunes, me asomé a la ventana y vi a mi perro en la jaula, abandonado, con la luz apagada, es decir, arrumbado".
"Regresé al mostrador de Aeroméxico y les dije "Ahà está mi perro" y el personal me dijo que ellos no son responsables y que no me pueden ayudar, les dije que cómo es posible que no les importe dejar a un perrito sin comer, todo el fin de semana en esa bodega. A lo que el personal de Aeroméxico me dijo que no era su problema. Obviamente la gente del aeropuerto tampoco me ayudó para nada".
Tras la nula respuesta, Felipe permaneció hasta las 23:00 horas en el aeropuerto, "marcando al 01 800 de Aeromexico y a quién se me ocurrió y ninguna de las "˜ejecutiva"™ me ayudó con el problema. Eso habla que a la gente que trabaja en "ª"ŽAeroméxico"¬ les vale un sorbete la dignidad y la protección animal"…