La semana pasada, los viajeros que, por circunstancias económicas o por exigencias de los directores financieros, se ven obligados a volar en la parte trasera del avión recibieron otro golpe. Emirates Airlines está considerando la idea de que los pasajeros paguen por sus «extras» a bordo.
El año pasado, los beneficios de Emirates se desplomaron un 82% debido a la crisis económica y la tensión política del Golfo y a la prohibición de Estados Unidos de transportar portátiles.
Para aquellos que viajan en primera clase o en business, volar sigue siendo algo llevadero, pero resulta cada vez más duro para el resto de viajeros. Pero, ¿qué pueden hacer los pasajeros para que los vuelos en clase turista no sean tan horribles? A continuación, se muestran cinco sugerencias que se adoptaron durante los años de austeridad en las aerolíneas.
La estrategia del sábado noche
Por lo general, las aerolíneas cobran menos si el viaje se realiza un sábado por la noche.
Muchas aerolíneas tienen clase económica premium, que cuenta con varias ventajas frente a la clase económica. En primer lugar, los asientos son un poco más amplios y tienen más espacio para las piernas. En segundo lugar, en los vuelos en clase económica premium se acumulan más millas.
Otra ventaja de esta clase es que se pueden disfrutar de los beneficios que se dan por garantizados en la clase económica, como los calcetines que se ofrecen durante el vuelo o los cepillos de dientes desechables con pasta de dientes…
