Pese a que son contados los casos, existe el riesgo de que viajar en avión provoque una trombosis venosa profunda.
Dicho padecimiento es causado por la formación de un coágulo en las piernas aquellos que tengan alguna predisposición o un factor de riesgo.
Los síntomas previos a una posible trombosis incluyen la debilidad o parálisis de la cara o extremidades de forma repentina, complicaciones de habla, entendimiento, visión o movimiento, mareo, vértigo y repentinos dolores de cabeza.
"La trombosis del viajero es venosa, no arterial, y se produce en los miembros inferiores por la inmovilidad durante el vuelo. Los pacientes predispuestos a la formación de coágulos, ya sea porque tienen várices o trastornos de la coagulación, entre otros factores, pueden desarrollar ese trastorno", explica el coordinador de la Unidad Corazón-Cerebro del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA), Augusto Vicario.
Por su parte, Susana Lloveras, presidenta de la Sociedad Latinoamericana de Medicina del Viajero (SLAMVI) dijo que condiciones como la obesidad, usar anticonceptivos orales, el embarazo, o tener antecedentes de alguna alguna enfermedad tromboembólica, son algunos de los factores de riesgo del padecimiento.
Por lo mismo, Lloveras recomendó considerar el tiempo de viaje, ya que "más de cuatro horas ya es un viaje de riesgo, aunque el síndrome de la clase turista está más asociado con los vuelos de más de ocho hora", explicó.
Igualmente, la doctora recomendó mover piernas y pies durante viajes largos para promover la circulación…