El vuelo UA971 de la compañía United partió de Roma en la noche del sábado y se dirigía a la ciudad de Chicago, en EE.UU.. Pero una situación insólita convirtió el viaje en una odisea de perfiles tragicómicos para los 269 pasajeros de la aeronave.
Todo comenzó cuando unos quince minutos de haber despegado, con las luces indicadoras de uso de cinturones de seguridad aún encendidas, uno de los pasajeros se levantó de su asiento para pedir nueces o galletitas y no volvió a sentarse hasta que no logró que le sirvieran su snack.
Sin embargo, diez minutos después, el hombre volvió a ponerse de pie y a exigir más nueces o galletas. El personal del avión entonces le explicó que podrían darle más comida si quedaba una vez que hayan servido a los demás pasajeros, cuenta el diario inglés The Telegraph, a lo que Jeremiah Mathias Thede, de 42 años, con domicilio en Alameda, California, contestó: "Puedo tener todas las nueces o galletas que yo quiera", frase en la que intercaló un insulto.
A partir de allí, según indican los testimonios de algunos de los tripulantes difundidos por el Telegraph, el hombre se paraba de su asiento y volvía a él repetidamente, obstaculizaba la circulación en los pasillos e iba al baño y volvía…
