Un vuelo nocturno de San Petersburgo a Novosibirsk se convirtió en una travesía de pesadilla por un pasajero que, sin motivo aparente, comenzó a atacar al resto de viajeros, especialmente a las mujeres, y debió ser controlado por la fuerza por la tripulación con ayuda de oros presentes.
El sujeto, de 47 años, tenía un asiento en la parte posterior del avión, pero continuaba caminando por los pasillos, inquieto. Tras lanzar algunos insultos, comenzó su serie de ataques comenzó con una mujer: se sentó a su lado y comenzó a acosarla, tocándole el cabello e incomodándola.
Posteriormente, enfiló contra otro sujeto. «Estaba atacando a pasajeros al azar, les pegaba», declaró Stanislav Semenov, testigo del hecho, según publicaron medios británicos.
Después, ocupó otro asiento, junto a un hombre y una niña, a la que tomó por el cuello por unos instantes…
Imagen: Enos Moura