Las horas transcurren lentamente, hay poco movimiento en cada butaca hasta que llega la hora de la comida. Las luces se encienden de a poco y las azafatas se acercan a preguntar si desea carne o pollo.
Las opciones más comunes vienen acompañadas de arroz o spaghetti, en el menú de los aviones. El piloto privado Hernán López cuenta que la comida en los aviones tiene menús quincenales para evitar cansancio en el paladar de sus pasajeros. Por lo que las posibilidades de repetir un plato son bajas. Aunque el menú para la tripulación es distinto, López ha logrado reconocer algunos de los platillos que más se repiten en los vuelos. Entre ellos los ñoquis y el stroganoff. La comida italiana tiene facilidad de elaboración y conservación por lo que puede ser uno de los motivos que se repita constantemente en el menú, dice López, aunque varÃen las salsas de acompañamiento.
Los menús dependen del tipo de vuelo en que se encuentre la nave, pues aquellos que son de corta duración suelen ofrecer alimentos para picar, postres o sánduches. Julio Gamero, vocero de Avianca, explica que en la aerolínea los vuelos nacionales disponen de snacks, mientras que los internacionales entregan desayuno, almuerzo y cena, dependiendo de la hora y duración del vuelo. En rutas de larga duración, los pasajeros "“dice Gamero- prefieren platillos que tengan carne, pollo y en menor porción las pastas. Todos incluyen una entrada, ensalada y postre para entregar un balance nutricional, indica Gamero.
Algunas aerolíneas han tratado incluso de crear una experiencia gastronómica de su servicio a bordo contratando a chefs reconocidos para que se encarguen de su oferta en el aire. Tal es el caso de Singapore Airlines que contrató a Carlo Cracco "“ganador de dos estrellas Michellin- o British Airways que en el 2011 se alió con Heston Blumenthal y su relación con el chef se grabó en un documental llamado "˜Heston Mission Impossible"™…
