El reciente escándalo protagonizado por una pasajera colombiana alicorada, a bordo de un vuelo de Avianca rumbo a Nueva York, hizo que muchos se preguntaran qué pasa si las personas se pasan de tragos a bordo. Y aunque este caso no pasó de ser un escándalo en redes sociales, no siempre se cuenta con la misma suerte. El capitán Julián Pinzón, director de Seguridad Aérea y Asuntos Técnicos de la Asociación Colombiana de Aviadores Civiles, explica lo que puede acarrear este comportamiento.
Si está ebrio antes…
El personal en tierra y los auxiliares de vuelo hacen las preguntas al pasajero: "¿ha consumido alcohol?", "¿cuántos tragos ha bebido?" y dependiendo del comportamiento y la coherencia del pasajero avisan al capitán del vuelo, quien se cerciora de las condiciones del mismo. Y solo él decide si la persona ingresa o no a la aeronave. Se puede pedir una segunda opinión que puede ser al médico de sanidad portuaria o al de la compañía aérea.
Dentro del avión
Si el pasajero aborda ligeramente alicorado, bajo la respectiva autorización, la tripulación corrobora que no haya ingresado ninguna bebida y no le ofrecen ninguno de los tragos que brinda la aerolínea; de ser necesario, lo cambian de asiento para que no incomode a la persona que está a su lado. Pero las cosas cambian en clase ejecutiva o primera clase, pues allí hay bar abierto, obviamente bajo supervisión. De ser necesario, la tripulación puede cerrar el bar…