Amado por muchos y odiado por otros, que lo consideran algo así como un "templo de la perdición y el consumismo", los Duty Free Shop suelen ser el lugar ideal para matar el tiempo de ocio y ansiedad antes de embarcar al avión.
Pero según el posteo realizado en el blog de viajes de Despegar.com, lo más conveniente es no tentarse y realizar compras en los Free Shops argentinos al regreso del viaje. ¿Por qué? ¡Seguà leyendo!
Impuestos
Ir a comprar en el Free Shop suele ser más barato porque estas tiendas venden sus productos con la reducción o exención de derechos de importación. Debido a que están situados en las zonas de embarque y desembarque de los aeropuertos, los que que viajan o regresan del exterior pueden aprovechar los precios de los Free Shop y deducir impuestos.
Por otro lado, aunque los precios figuran en dólares, en los Free Shop del país no se cobra el impuesto del 35%. Este impuesto se genera por consumos hechos en el exterior o por compras de paquetes, vuelos o reservas de hoteles. Por más de que los precios están en moneda extranjera, las compras se pasan en pesos y se pueden hacer en varias cuotas…