Actualmente los aviones surcan los cielos a alturas de hasta 40.000 pies.
A esa altitud, la atmósfera es más delgada y ofrece menos resistencia, lo que significa que una aeronave puede volar de manera más eficiente. También ayuda a evadir el mal tiempo, que tiende a estar presente a niveles más bajos. Ese mal tiempo incluye truenos y rayos.
En este sentido, mientras las aeronave navegan a mayor altura disminuyen las posibilidades de que sea alcanzada por un rayo, pero aun así sabemos que hay un alto grado de curiosidad sobre lo que realmente sucede si esto pasara.
Alex Passerini, Jefe Técnico de Pilotos de Qantas, cuenta cómo enfrenta un clima tormentoso y por su parte, el Ingeniero de Mantenimiento de Aeronaves de Qantas, Grant Michelmore, explica cómo los aviones están diseñados para hacer frente a los rayos.
Algunos datos de los rayos
• La mayoría de los aviones de pasajeros están fabricados de aluminio. Este es un material que conduce electricidad y permite que el rayo pase a través de la superficie de la aeronave, permitiendo generalmente que la corriente salga por la cola.
• Los aviones de pasajeros de hoy están diseñados para resistir y volar de forma segura cuando son alcanzados por un rayo.
• Algunos pasajeros han dicho que escucharon un fuerte estallido o un rayo de luz brillante cuando el avión en el que han estado volando fue impactado y en otros casos, es posible que ni siquiera lo noten.
• En los primeros días de la aviación, los aviones estaban hechos de madera y tela, no siendo los mejores materiales para volar en condiciones tormentosas.