Una trágica muerte encontró un joven de 25 años, que intentaba escapar de la deportación, mientras el vuelo que lo trasladaba de Madrid a Armenia hiciera escala en el aeropuerto de Moscú.
Albert Yepremyan debía abordar un nuevo avió con destino a Ereván, la capital armenia, cuando en un descuido de sus custodios arrancó haca la pista de aterrizaje, donde fue atropellado por un Boeing 737 que se disponía a despegar.
Las autoridades reportaron el escape de Yepremyan, aunque no se enteraron del trágico final que enfrentó hasta horas después.
«Tan pronto dejó el avión en Moscú, su destino fue desconocido», señalaron las autoridades en un reporte, en el que además afirmaban que el detenido en Madrid «no cruzó la frontera con Rusia».
¿UN ANIMAL?
El atropello fue reportado por el piloto del Boeing -según consigna el medio inglés The Sun– aunque en su informe sostuvo que había golpeado un animal.
Como no se reportaron daños en la nave, el capitán decidió despegar hacia Atenas, destino que tenía programado, y llamó a los funcionarios para que revisaran la pista y evitar nuevos inconvenientes.
Ahí fue, cuando llegó el personal de limpieza, que descubrieron los restos de Yepremyan y sus pertenencias…