La cámara baja del Parlamento alemán ha aprobado un paquete de medidas para reforzar los controles médicos a los pilotos en respuesta al siniestro provocado por Andreas Lubitz, el copiloto de Germanwings que se suicidó estrellando un avión en los Alpes franceses con todos sus ocupantes.
La nueva normativa impondrá mayores obligaciones de información sobre el estado de salud de los pilotos hasta el punto de crear una base de datos y aumentará las pruebas para detectar alcohol y drogas.
Las investigaciones posteriores a lo que en principio parecía un accidente aéreo revelaron que en realidad era un plan urdido por Lubitz para estrellar el avión. El piloto tenía problemas mentales y estaba tomando antidepresivos, entre otros medicamentos, además de estar de baja el día dle suceso, sin que la empresa lo supiera.
La sede legislativa ha dado su visto bueno al borrador un día después de que las familias de 80 de las vÃctimas del siniestro anunciaran una demanda por homicidio imprudente al Centro de Entrenamiento de Aerolíneas de Arizona, filial de la compañía Lufthansa, al no informar del historial médico del piloto alemán, Andreas Lubitz…