En el marco de la celebración del día de la Tierra, Avianca presentó un balance de lo conseguido el año pasado en términos de sostenibilidad.
La aerolínea cuenta con una de las flotas más jóvenes de la región, lo que le permite reducir el impacto sonoro en el medioambiente y las comunidades aledañas a los aeropuertos. Sus aviones son, en promedio, un 50% más silenciosos que hace 10 años, según datos de los fabricantes Boeing y Airbus. Una de sus metas cada año es, precisamente, seguir reduciendo las emisiones de CO2 y el consumo de combustible por operación de aeronaves.
El año pasado, logró 66,1% menos de emisiones C02 y compensó 200 mil toneladas de dióxido de carbono con la compra de Bonos de Carbono en Colombia, lo que equivale al 64,17% de las emisiones de CO2 generadas por la operación doméstica en el país.
Estos recursos se destinaron a los proyectos de reforestación, restauración y conservación de bosques en Colombia: Forestal de La Orinoquía y Reforestación Comercial en el Meta.
Asimismo, la empresa redujo el 35,1% de residuos peligros generados con respecto al año 2019. 82% del total de estos residuos pasaron por procesos de aprovechamiento y transformación, lo que permitió valorizarlos y generar mejores resultados ambientales.
“Trabajamos continuamente en la implementación de mecanismos de control operacional de nuestras actividades, para mitigar los riesgos ambientales y lograr un equilibrio con el medio ambiente y la sociedad. Ya incorporamos desde hace un tiempo en nuestra estrategia el concepto de economía circular para optimizar la eficiencia operacional gestionando de forma integral los recursos naturales, los procesos y los residuos generados por nuestra actividad”, afirmó Felipe Andrés Gómez, director de Relaciones Institucionales y Sostenibilidad de Avianca.
Para lograr la transición de una economía lineal a una economía circular, la compañía ha trabajado en el cambio cultural de los trabajadores, la optimización de sus procesos internos y la inercia con las cadenas de valor, lo que ha permitido reducir sus impactos ambientales y responder a los retos ambientales globales, así como a los objetivos establecidos para el sector aeronáutico en materia de cambio climático.
Parte de las iniciativas adelantadas por la aerolínea incluyen también Modelos de Valorización de Residuos, Modelos Circulares a través de la simbiosis industrial (reutilización de productos y materiales para cerrar su ciclo a través de alianzas estratégicas con proveedores) y Modelos para alargar la vida útil (ecodiseño, rediseño de productos y procesos), además del trabajo conjunto con los proveedores estratégicos para lograr cadenas de suministro sostenibles.
“En Avianca reiteramos nuestro compromiso con el desarrollo sostenible. Hace dos meses nuestro Centro de Mantenimiento Aeronáutico de Rionegro se convirtió en el primer MRO en el mundo, fuera de Estados Unidos, en recibir la certificación LEED Oro otorgada por el GBCI (Green Business Certification Inc) y avalada por el Consejo de construcción verde de Estados Unidos (U.S. Green Building Council), gracias a su diseño y proceso de construcción sostenible, y nuestras metas este año están alineadas con las prioridades globales para convertirnos en una compañía cada día más sostenible”, aseguró Gómez.
