Las compañías de transporte aéreo le salieron al paso, con números en mano, a la solicitud que hizo este martes la ministra de Comercio, Industria y Turismo, Cecilia Ãlvarez-Correa, a Avianca y a las demás aerolíneas, para que bajen el precio de los pasajes locales, con el fin de fomentar el turismo.
El director ejecutivo de la Asociación del Transporte Aéreo de Colombia (Atac), Gilberto Salcedo, aseguró que el sector ha hecho un esfuerzo en materia de precios, situación reflejada en un reciente análisis, en el que se comparan las tarifas de los cinco países más representativos de Suramérica en materia aeronáutica, entre los que figuran Argentina, Chile, Brasil, Colombia y Perú. En esta muestra, cuando se mide el precio del kilómetro por pasajero, Colombia está en un nivel de 14 centavos de dólar, y se ubica como el segundo menos costoso en este grupo, después de Brasil.
"Esta es una industria que si bien tiene altos ingresos, también tiene altísimos costos, pues el margen de rentabilidad promedio del sector es cercano al uno por ciento", indicó el dirigente gremial, al explicar que bajar precios es un tema que puede comprometer la sostenibilidad de las compañías.
Sumas y restas
Según Atac, pese a la caída del petróleo y del valor del combustible, este factor no se puede mirar de manera aislada, sin mirar el efecto de la devaluación en la estructura de costos de cada empresa.
Así, mientras en los últimos cuatro meses del 2014 el combustible que usan las aeronaves estaba cayendo cerca de 39 por ciento, incidiendo en el 32 por ciento de la estructura de costos, al mismo tiempo la mitad de la estructura de costos de las empresas, que incluye factores como el arrendamiento de los aviones y precio de los combustibles, está expresada en dólares, por lo cual se está sintiendo el impacto de un dólar más caro.
Cuando se ve el efecto neto de estos dos factores, según Salcedo, en lugar de abaratarse la estructura de costos, se podría estar encareciendo en medio punto porcentual.
Atac llamó de nuevo a las autoridades para que controlen de manera efectiva y oportuna las alzas desmedidas que se vienen dando en algunas concesiones aeroportuarias en aspectos como los arrendamientos y, en el caso puntual de Bogotá, en la administración de la nueva red de hidrantes, que terminó subiendo en 83 por ciento el costo operativo de la operación por combustible.
Al tomar el nivel de consumo de combustible del 2013, que fue de 220 millones de galones, la nueva tarifa aplicada implica un sobrecosto de 21 millones de dólares al año para las empresas por la operación en Bogotá, solamente por este factor…
