Con gran hermetismo la cúpula mayor de Avianca se encuentra definiendo el futuro de la compañía; decidiendo por alguna de las ofertas que ha recibido para la venta de parte o la totalidad de la compañía. Se trata de una decisión que, sin dudas, podría cambiar el panorama actual de la industria aeronáutica del continente, ya que se trata de la segunda empresa aérea en la región.
Según publicó la semana pasada el New York Times, United habría ofrecido prestarle a Avianca 500 millones de dólares. Por su parte, Delta llegaría a los 1.900 millones de dólares, de los cuales 1.000 millones serían en efectivo, por la mayoría que tiene el grupo Synergy (51,5%). Y Copa estaría dispuesta a pagar 2.000 millones de dólares por todas las acciones o una mezcla de dinero contante y sonante con acciones. Uno de los puntos álgidos de la negociación en un principio habría sido la insistencia de Germán y José Efromovich en conservar la mayoría accionaria.
Analistas conceptúan que Delta estaría más interesada en la compra total y tendría cierta delantera, dada su solidez financiera y su interés en aumentar las conexiones entre Estados Unidos y América Latina, obteniendo así un cubrimiento desde Canadá hasta Argentina. Mientras tanto, a Copa le sonaría bien la posibilidad de una fusión, con el fin de aumentar su tráfico entre destinos directos. Sin embargo, para concretar el negocio debería someterse al control de las autoridades de competencia y posiblemente renunciar a rutas con el fin de disuadir posibles afectaciones al consumidor con una posición dominante.