Como puntapié inicial de la Reunión General Anual (AGM 2015) de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) Peter Cerda, vicepresidente regional para las Américas de la entidad, anunció que el crecimiento del tráfico aéreo en Latinoamérica y El Caribe podría llegar a alcanzar los 385 millones de pasajeros en los próximos diez años. Esto si es que los gobiernos de la región abordan el problema de la infraestructura y su congestión aérea, aplican una regulación más inteligente y adoptan estándares y mejores prácticas globales. Cabe considerar que en 2014, el número de pasajeros en la región llegó a los 242 millones.
Hoy el aporte de la aviación es de 4,9 millones de empleos en Latinoamérica y El Caribe y 153.000 millones de dólares a su PIB. Si bien la región cuenta con más del 8% de la población mundial, solo representa el 5% del tráfico aéreo global. Es por esto que se debe incrementar su tráfico aéreo en más del 50% antes, incluso, de alcanzar su cuota mínima potencial. Pero para conseguirlo, se deben eliminar todas las barreras como la carencia de infraestructuras adecuadas, principalmente la infraestructura aeroportuaria.
Es importante destacar que sólo dos países, Panamá y Barbados, se encuentran entre los 35 primeros países del mundo por la calidad de sus infraestructuras aéreas. Entre las economías más grandes de la región, Brasil ocupa el puesto 131, Colombia, el puesto 105, y México, el 64. Pero también hay algunos aspectos muy positivos, como el futuro aeropuerto de la Ciudad de México, una excelente oportunidad para crear un hub de clase mundial diseñado para ofrecer todo el confort que demandan los pasajeros con el mínimo coste tanto para aerolíneas como viajeros.
Cerda también indicó que también la región debe preocuparse por conseguir "una regulación más inteligente en línea con los estándares y mejores prácticas globales. Los gobiernos de la región, con excepción de Panamá y Chile, tienden a ver las aerolíneas como proveedores de servicios de lujo y un blanco fácil para la recaudación de impuestos o la aplicación de regulaciones onerosas. Un buen ejemplo de ello es Brasil, donde, lamentablemente, la regulación de los derechos del consumidor no está en línea con los estándares y mejores prácticas globales y castiga de forma injusta a la aviación". Al respecto agregó que "somos muy buenos para reaccionar ante una crisis, pero no somos buenos siendo proactivos ni pensamos en una real proyección a 15 o 20 años. Esto debemos mejorarlo si es que queremos competir con mercados como Singapur o China, entre otro". Sin embargo, Cerda indicó que en el ámbito que la región se destaca es en materia de integración, "somos un ejemplo de ello y Latam o Avianca Taca entre varios otros son la mejor prueba".
