"Aunque hay una proyección de déficit para 2016, vemos muy buenas condiciones para el 2017, que es cuando esperamos que Tame sea totalmente rentable", indicó ayer Paola Carvajal, gerente general de la aerolínea. Tame registró pérdidas por $ 48 millones en 2014 y se estima que en 2015 estas asciendan a $ 10 millones. Para enfrentar la situación, las estrategias están orientadas a la diversificación de mercados, dinamización del turismo local, fortalecimiento de los vuelos de carga y un programa de fidelización de clientes.
A través de la reducción de costos operativos, la aerolínea logró ahorrar $ 30 millones, de septiembre de 2015 a la fecha. Una de las medidas fue la reestructuración de vuelos, por ello se decidió suspender 5 rutas entre nacionales e internacionales como Quito-Sao Paulo-Quito o Quito-Fort Lauderdale-Quito.
Al año la empresa moviliza a cerca de 2 millones de pasajeros y cuenta con una flota de 20 naves. Para Carvajal, lo óptimo son apenas 11, por lo que dos no serán recontratadas el próximo año y analizan la posibilidad de vender 4. Respecto a las rutas nacionales, apuntó que 5 son rentables: Quito, Guayaquil, Galápagos, Cuenca y Manta. "Conocemos las necesidades de los pasajeros de trasladarse a ciertos destinos y aunque no son atractivos comercialmente, para Tame es atractivo conectar al paÃ", apuntó.
Y pese a que las operaciones hacia Santa Rosa y Loja son costosas, se mantendrán por la ocupación. Como parte de la política de ahorro, la aerolínea también optimizó las horas extras y los turnos de sus empleados…