Pese a las regulaciones internacionales y estadounidenses que requieren que se hagan controles a los pilotos comerciales sobre su salud mental, Pilotos y expertos en seguridad señalaron en la práctica se realizan pocas comprobaciones y de escasa eficacia.
El siniestro del vuelo 9525 de Germanwings, estrellado contra los Alpes y en el que murieron las 150 personas que iban a bordo, ha planteado dudas sobre el estado mental del copiloto. Las autoridades creen que el joven alemán, de 27 años, decidió destruir el Airbus A320 de forma deliberada cuando volaba el martes de Barcelona a Duesseldorf.
En Estados Unidos, la Administración Federal de Aviación (FAA) requiere que los pilotos pasen una revisión médica con un doctor especializado una vez al año o cada seis meses, en función de la edad del piloto. La Organización Internacional de la Aviación Civil, una agencia de la ONU que establece estándares globales de aviación, también requiere que los pilotos pasen una prueba médica que incluye una evaluación mental.
Técnicamente, se supone que los médicos deben buscar problemas mentales, pero varios pilotos dijeron el jueves que ése no suele ser el caso.
«En realidad no hay evaluación de salud mental», dijo John Gadzinski, capitán en una gran aerolínea estadounidense y ex piloto militar. En 29 años de pruebas médicas, señaló, nunca se le ha preguntado por su salud mental.
«Revisan los ojos, los oídos, el corazón… todas las cosas que empiezan a ir mal cuando te vas haciendo mayor. Pero no hacen nada por tu cabeza, no», comentó a su vez Bob Kudwa, ex piloto de American Airlines y directivo que mantiene su licencia de piloto comercial.
Además, no hay un sistema de información confidencial, dijo Gadzinski. «Si tienes un problema mental, desde luego no se lo dirías a tu médico de vuelo porque va directo a la FAA», dijo.
Los pilotos también deben informar de cualquier problema psicológico o medicación previos en los formularios que cumplimentan para la FAA. No hacerlo podría suponer una multa de hasta 250.000 dólares. Los formularios incluyen preguntas sobre si un piloto está deprimido o ha intentado suicidarse, explicó Gazinski.
«¿De verdad es éste el mejor modo? ¿Preguntarle al tipo que tiene una enfermedad mental si tiene una enfermedad mental, y si dice ‘no’, estamos listos?», preguntó.
Por su parte, Europa tiene un estándar único para las pruebas médicas de los pilotos.
«Estas evaluaciones médicas las hacen doctores con una especialización en salud de aviación (…) Saben qué buscar, a nivel físico y mental», afirmó Richard Taylor, portavoz de la Autoridad británica de Aviación Civil.
Lufhtansa, propietaria de la aerolínea regional Germanwings, no tiene conocimiento de qué podría haber llevado al copiloto Andreas Lubitz a «tomar esta terrible acción», dijo Carsten Spohr, director ejecutivo de la operadora.
Por lo general, las aerolíneas piden a los pilotos que pasen evaluaciones mentales cuando piden un empleo, pero las pruebas de seguimiento tras tu contratación son someros en el mejor de los casos, según los expertos.
«Si uno tiene 12.000 o 15.000 pilotos como tiene American Airlines (…), de vez en cuando va a tener un chalado, no importa cuánto intente evitarlo», comentó Kudwa.
Cuando eso ocurre, otros pilotos que vuelan con el piloto inestable «tarde o temprano harán que lo sepa el jefe y entonces un controlador viajará con él» para ver si hay un problema, señaló.
El controlador es un piloto de la aerolínea que evalúa la capacidad de otros pilotos volando con ellos y viendo cómo trabajan. Sin embargo, es poco habitual que esas comprobaciones deriven de preocupaciones relacionadas con la salud mental, dijo Kudwa…