El fiscal general del estado de Nueva York, Eric Schneiderman, afirmó que las nuevas disposiciones migratorias anunciadas hoy por la Casa Blanca dejan clara «la intención de discriminar a los musulmanes».
Las nuevas disposiciones excluyen a los ciudadanos de Irak de una disposición anterior que detenía durante 90 días la emisión de visados en ese país y a seis naciones más de mayoría musulmana (Irán, Somalia, Yemen, Libia, Siria y Sudán).
Además, se acordó que se prohibirá la entrada de refugiados a Estados Unidos, durante 120 días, a fin de reforzar los procedimientos de seguridad.
«Los tribunales de todo el país han dejado claro»: el presidente (Donald) Trump no está por encima de la Constitución», afirmó Schneiderman en una primera reacción ante las nuevas disposiciones.
«Si bien la Casa Blanca puede haber hecho cambios en la prohibición, la intención de discriminar a los musulmanes sigue siendo clara», agregó Schneiderman en un comunicado.
Según el fiscal general del estado, estas políticas son «diametralmente opuestas» a los valores estadounidenses y hacen que se sientan «menos seguros».
«Mi oficina está revisando de cerca la nueva orden ejecutiva y estoy listo para litigar de nuevo para proteger a las familias, las instituciones y la economía de Nueva York», agregó.
Cuando se conocieron las primeras disposiciones migratorias de la Administración Trump, a fines de enero, Schneiderman presentó una demanda en su contra e impulsó acciones parecidas de otros fiscales generales para oponerse en los tribunales a estas medidas.
Por su parte, la organización Make the Road, que defiende los derechos de los inmigrantes, aseguró que, a pesar de estos cambios en las disposiciones, «todavía representan la misma visión oscura y un peligroso ataque» a los valores estadounidenses…
