El tipo de daño sufrido por los cuerpos de los pasajeros del avión A321 siniestrado en Egipto el 31 de octubre, puede indicar que la explosión a bordo de la aeronave se produjo antes de chocar contra la tierra, informa Ria Novosti citando a una fuente médica.
«La gran parte de fragmentos separados de los cuerpos puede indicar que una fuerte explosión ocurrió a bordo antes del choque con la tierra», ha expresado un médico forense egipcio que ha participado en la inspección, ha informado Ria Novosti.
Asimismo, la fuente ha señalado que, dado el estado en el que se encuentra la mayoría de los cuerpos, para su identificación puede ser necesario un análisis de ADN.
Anteriormente se informó que un satélite infrarrojo estadounidense detectó una explosión térmica sobre el Sinaà en el momento en que se cayó el avión ruso, la cual podría haberse producido por un estallido en un depósito de combustible o en el motor, como consecuencia de un fallo mecánico, pero también podría haberse tratado de una bomba…