El cada vez más acelerado crecimiento del transporte aéreo, reflejado en un aumento de la demanda de pasajeros, -el cual cerró el 2017 con un incremento del 7,6% respecto a 2016, cifra que superó la tasa promedio de crecimiento de la última década (5,5%); sumado a las positivas cifras de la demanda por transporte de carga vía aérea que creció un 9,0%, lo que dobla a lo alcanzado el 2016 (3,6%)- hacen de esta industria un motor para las economías locales, pero a la vez plantea un sinnúmero de desafíos para quienes forman parte de esta cautivante industria.
Es por esto que la implementación de tecnologías y herramientas de apoyo a la gestión de cada etapa que compone su cadena de valor, se vuelven vitales para ir de la mano con este vertiginoso crecimiento. Para entender más sobre este tema consultamos con el experto, Filipe Reis, director regional de APCS (Aeropuertos, Pasajeros, Carga y Seguridad) para Las Américas de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés) y así poder conocer las posibles soluciones que facilitarán y optimizarán la gestión aeroportuaria.
ALN: Existen muchos aeropuertos importantes en Latinoamérica que están siendo remodelados o están creciendo, sin embargo, se dice que muchos de ellos al momento de ser terminados ya podrían estar saturados. Según su visión ¿qué falta para que este tipo de dificultades no ocurra y qué deben hacer tanto autoridades como los concesionarios frente a ello?
Por nuestra experiencia lo necesario para hacer frente a ese reto es tener una visión a largo plazo para el sistema de aeropuertos, así como realizar revisiones de los planes maestros cada 5 años. Esto para certificar que la capacidad operativa de las instalaciones pueda soportar el crecimiento que se anticipa para el próximo periodo. Esto, considerando especialmente que muchos de los principales aeropuertos de la región están bajo el sistema de concesión, y los contratos deben reflejar ese requerimiento.
Otro aspecto absolutamente fundamental es que ese proceso sea conducido en estrecha colaboración con las aerolíneas, ya que las mismas validaran el volumen de pasajeros y operaciones esperadas, así como indicaran sus necesidades en términos de procesos y tecnologías, lo que terminará dando forma a los servicios brindados a los viajeros.
ALN: Países como México, Argentina y Brasil, entre otros, registran altos costos de operación en sus aeropuertos, ya sea por sus tasas, el combustible u otros. ¿Cómo afecta esto la operación de las aerolíneas y su competitividad en la región, a las economías de dichos países y a sus pasajeros? ¿Cuál es, a su juicio, la mejor solución frente a esto?
La aviación es un gran motor que potencia la economía de los países y es clave para el desarrollo económico de las ciudades y regiones que sirve. Altos costos de operación, sean costos-país o de aeropuertos en especÃfico, disminuyen la competitividad del destino, lo que implica un menor volumen de pasajeros y carga transportados y, por ende, menos actividad económica, un menor potencial de generación de empleos y menos beneficios para la sociedad.
Creo que el punto fundamental aquà es definir cuál es la función que el aeropuerto debe desempeñar en cada caso, si es un negocio del cual el Estado y el concesionario quieren extraer el máximo en términos financieros, o más bien se busca crear las condiciones para que más pasajeros y carga lleguen o salgan a una localidad.
Por nuestra parte estamos muy convencidos que la segunda alternativa es más beneficiosa a largo plazo para la sociedad y su economía, ya que activa toda la cadena de valor como: hoteles, taxis, restaurantes y negocios que dependen de la aviación para transportar sus mercancías como frutas, pescado y flores. O sea, con más transporte ganan todos: la sociedad, su economía, los viajeros, el Estado, el concesionario y las aerolíneas.
ALN: Teniendo en cuenta los cambios que se avecinan para el Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (NAICM), nuevas obras, nuevas licitaciones, el desarrollo del área de carga y próximamente un cambio de Gobierno, ¿cree que es necesaria la generación de marcos regulatorios para poder evaluar su desempeño y calidad una vez que esté en operación?
Mega-obras como el NAICM casi siempre traspasan al menos a dos gobiernos, y para la aviación la decisión de llevar el proyecto adelante una vez pasadas las elecciones es de vital importancia, sobre todo considerando que el aeropuerto actual está muy cerca de su capacidad operativa. De no hacerlo, estamos convencidos que la ciudad y el país perderán importantes oportunidades que el proyecto les ofrece. Pero hablando del nuevo aeropuerto, creemos que algunos marcos deben estar presentes desde ya para garantizar que su operación sea eficiente y los costos competitivos de forma que se lleve a cabo la visión del proyecto, el ser un gran punto de conexión en Las Américas. En ese sentido estamos muy agradecidos por la oportunidad que el equipo de NAICM nos ha dado de trabajar de forma colaborativa en temas como la nueva terminal de carga y el check-in.
Tenemos muchos temas aún por definir y aprovechar la experiencia que IATA y nuestros miembros tienen en mega-proyectos sirve para lograr mejores resultados y disminuir riesgos. Con relación a los marcos de desempeño estamos proponiendo conceptos como Acuerdos de Niveles de Servicio (SLA"™s, por su siglas en ingles) y la Decisión Colaborativa para el Manejo del Aeropuerto (A-CDM).
Los SLA"™s tiene por objetivo garantizar el desempeño de un cierto componente del aeropuerto. Por ejemplo,el sistema de manejo de equipajes, que por un lado impacta la experiencia del pasajero, pero de igual forma impacta la capacidad de una aerolínea de mantener sus vuelos a tiempo. Por otro lado, el A-CDM busca maximizar la eficiencia de la infraestructura que apoya la operación de los aviones, tal como la utilización de la plataforma, las pistas y calles de rodaje. Ese aspecto tiene incluso impactos ambientales positivos. En el fondo, y en base a nuestra perspectiva, ese y otros conceptos deben estar incorporados en el proyecto desde su fase de planeación.
ALN: Aerolíneas a nivel internacional y algunas de nuestra región han comenzado a implementar el rastreo de equipaje (baggage tracking): ¿qué se está haciendo para avanzar en esta materia y cómo se hace compatible este sistema con los diferentes avances en tecnología e infraestructura en los diferentes aeropuertos? y ¿cuál será el impacto que tendrá para los pasajeros, debería traducirse en un costo económico más alto para ellos?
El 80% de las aerolíneas de la región están en camino a cumplir con la resolución de rastreo de equipaje en junio próximo. Es un bonito proyecto tanto para las aerolíneas como para los pasajeros, ya que permitirá a nuestros miembros tener un mejor control del proceso, lo que disminuirá las pérdidas o mal manejo de equipajes. Eso, por su lado, tendrá un efecto positivo en la satisfacción de los pasajeros. Un aspecto interesante es que ni las aerolíneas ni los aeropuertos tienen que necesariamente hacer inversiones en tecnología, o sea, cada aeropuerto tendrá la solución del tamaño necesario. En suma, esta es una buena noticia para todos.
ALN: Recientemente IATA y ACI lanzaron la iniciativa NEXTT (New Experience in Travel and Technologies) ¿en qué consiste y qué beneficios trae consigo y para quién?
NEXTT fue lanzado para establecer una visión común de cómo serán manejados los procesos en un aeropuerto en el futuro y cómo podemos como aerolíneas y aeropuertos sacar mejor provecho de las nuevas tecnologías para brindar un mejor servicio ante el volumen creciente de pasajeros y carga. Con eso esperamos direccionar mejor las inversiones en infraestructura y ayudar a los Estados a actualizar sus leyes. Los aeropuertos están volviéndose cada vez mayores, pero eso también tiene un límite.
Estamos estudiando qué tipo de procesos podemos sacar de los aeropuertos, si podemos reducir o eliminar las filas de espera y cómo hacer mejor uso del espacio disponible. Esto además de desarrollar aplicaciones de inteligencia artificial y mejorías en compartir data. Todo esto lo queremos hacer de forma integrada y segura para mejorar las operaciones y la experiencia de los pasajeros.