La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés) ha instado a los gobiernos a que establezcan urgentemente incentivos a gran escala para acelerar la expansión del uso de combustibles de aviación sostenibles (SAF, por sus siglas en inglés) con el fin de contribuir alcanzar las cero emisiones netas de la aviación en 2050.
Para cumplir con el compromiso cero neto de la aviación, las estimaciones actuales indican que los SAF podrían contribuir en un 65% a la mitigación de carbono de la aviación en 2050, lo que exigiría una capacidad de producción anual de 449.000 millones de litros. Con la inversión actual, se podrá aumentar la producción anual de SAF de los 125 millones de litros actuales a 5.000 millones en 2025. Con incentivos gubernamentales efectivos, la producción podría alcanzar los 30.000 millones de litros en 2030, lo que sería un punto de inflexión para la producción y utilización de SAF.
“Los gobiernos no necesitan inventar nada nuevo. Los incentivos para la transición de la producción de electricidad a fuentes renovables, como la solar o la eólica, funcionaron. Como resultado, las soluciones de energía limpia ahora son baratas y accesibles. Con incentivos similares, podríamos contar con una producción de 30.000 millones de litros de SAF en 2030. Y aunque aún estaríamos lejos de nuestras necesidades, sería un punto de inflexión hacia nuestra meta ambiciosa del “cero neto” con grandes cantidades de SAF a precios asequibles”, dijo Willie Walsh , director general de IATA, en la 78ª Asamblea General Anual de IATA, en Doha, Qatar.
En 2021, independientemente del precio (SAF cuesta entre dos y cuatro veces más que el precio del combustible para aviones convencional), las aerolíneas compraron hasta la última gota de los 125 millones de litros de SAF que estaban disponibles. En la actualidad, más de 38 países cuentan con políticas específicas que allanan el camino para el desarrollo del mercado de combustibles sostenibles. En consonancia con tales medidas, las aerolíneas han avanzado acuerdos de compra de SAF por valor de 17.000 millones USD.
Incentivos para aumentar la producción
Para incrementar la inversión en producción, necesitamos políticas adecuadas que ayuden a aumentar la oferta y reducir los costes.
La producción de electricidad con energía solar o eólica se enfrentó a obstáculos similares cuando estas tecnologías comenzaron a reemplazar a los combustibles fósiles. Con incentivos políticos efectivos, ahora ambas son asequibles y están ampliamente disponibles.
Con políticas similares basadas en incentivos a los SAF, la producción global podría alcanzar los 30.000 millones de litros al final de esta década, un punto de inflexión que demostraría que los SAF están desempeñando el papel previsto en la descarbonización a largo plazo de la aviación, lo que alentaría las inversiones para aumentar la producción aún más y reducir el precio.
Necesitamos promover el mercado de los SAF incentivando su producción. Estados Unidos es un buen ejemplo a seguir. Se espera que su producción de SAF alcance los 11.000 millones de litros en 2030 gracias a los fuertes incentivos gubernamentales.
No se puede decir lo mismo de Europa. Bajo su iniciativa Fit for 55, la UE planea exigir que las aerolíneas aumenten el uso de SAF en un 5% en todos los aeropuertos europeos en 2030. La descentralización de la producción retrasará el desarrollo de economías de escala. Y forzar el transporte terrestre de SAF reducirá el beneficio ambiental del uso de estos combustibles.
Otras tecnologías de propulsión
Las aeronaves de hidrógeno y eléctricas son parte del plan de la aviación para lograr cero emisiones netas en 2050, pero es probable que se limiten a rutas de corta distancia. SAF ya ha demostrado que es la alternativa para vuelos de larga distancia.
“Lo más probable es que los sistemas de propulsión de hidrógeno y/o electricidad estén disponibles para vuelos comerciales de corta distancia en 2035. Pero la mayoría de las emisiones provienen de los vuelos de larga distancia con aeronaves de fuselaje ancho. Los SAF es la la única solución que ha demostrado que puede reducir dichas emisiones. Sabemos que funciona, y debemos redoblar nuestros esfuerzos para lograr que todos los actores de la industria participen, incluidos los gobiernos, con el fin de aumentar la producción, la disponibilidad y la accesibilidad”, dijo Sebastian Mikosz, vicepresidente sénior de Medio Ambiente y Sostenibilidad de IATA.
Objetivo a largo plazo y cero neto
En octubre de 2021, las aerolíneas miembro de IATA acordaron el compromiso excepcional de alcanzar cero emisiones netas en 2050, en línea con el objetivo de limitar el calentamiento a 1,5 grados centígrados del Acuerdo de París. El cambio climático es la mayor amenaza que enfrenta nuestro planeta, y lograr cero emisiones netas es un gran desafío que exige que la industria mitigue 1,8 gigatoneladas de carbono en 2050.
Para conseguir su objetivo, la industria necesita el respaldo de políticas coherentes y estables que apoyen la inversión en el largo plazo. La industria de la aviación insta a todos los gobiernos a que apoyen la adopción de un objetivo climático a largo plazo para el transporte aéreo, en línea con el compromiso de la industria, en la 41ª Asamblea de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) el próximo mes de septiembre. Este objetivo climático es fundamental para respaldar el ambicioso objetivo de descarbonización de la industria y proporcionaría un marco multilateral global para la acción sin distorsionar la competencia.
Informe Medio ambiente y sostenibilidad (pdf)
