El director de Junta Directiva de Avianca además indicó que están abiertos a la posibilidad de la concesión o un Asocio Público-Privado, para continuar la consolidación de su hub
Aunque el gobierno ya tiene el plan maestro para la ampliación del Aeropuerto de El Salvador, el director de la Junta Directiva de Avianca, Roberto Kriete, recordó ayer que la principal terminal aérea del país «esta sobrepoblada» y que la aerolínea continúa en la disposición de construir su área de operaciones a mediano plazo.
Por ello el empresario indicó que este proceso se prolongó por demasiado tiempo y consideró que las alternativas evaluadas como un Asocio Público-Privado (APP), inversión pública directa o concesión «son viables», siempre y cuando las autoridades gubernamentales den señales claras para los clientes del Aeropuerto.
«Es cuestión de los funcionarios definir la modalidad de gestión. Nos gustaría que estas medidas se den más rápido pero estamos en un periodo de transición (de gobiernos) por lo que conversaremos luego del 1 de junio», afirmó Kriete.
Asimismo, ante las medidas que ejecuta actualmente la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA), Kriete reconoció que muchas mejoras no son visibles para el viajero, aunque si favorecen a las aerolíneas, como por ejemplo el recarpeteo de la pista principal y las calles de rodaje, lo cual favorece a la seguridad de vuelo y reduce el desgaste de los trenes de aterrizaje de las aeronaves.
«Es importante que todo se ejecute, que no quede en el tintero. Nuestra relación con CEPA ha sido afortunada pero el Aeropuerto es la casa de Avianca y se debe de pensar a futuro», valoró el empresario.
De este modo, el énfasis de Kriete al respecto es sobre el proceso de consultas para la ampliación, a 20 años plazo y a un costo de $420 millones, sobre todo por la apuesta de Avianca de mantener el Aeropuerto como su centro de conexiones (hub) en Centroamérica, algo que generó un crecimiento de 40 % en las cifras del conglomerado luego de reestructurar bancos de vuelos desde San José, Costa Rica, hacia El Salvador.
«Hemos subrayado muchas necesidades a los consultores de CEPA. En este momento somos indiferentes ante la modalidad (de ejecución) de la ampliación pero, si lo construimos nosotros vamos a ajustarlo a varios estándares operativos del grupo», reflexionó Kriete.
Al inicio de su gestión, el actual presidente de CEPA, Hugo Barrientos, indicó que no descarta la posibilidad de concesionar para las operaciones de Avianca, el principal cliente del recinto aeroportuario.
«Sabemos que el problema para la ampliación son los costos a corto y largo plazo y por lo tanto tenemos que valorar todos los escenarios, incluyendo una concesión. Es un modelo viable porque la aerolínea realiza casi el 80 % de todas las operaciones del Aeropuerto», subrayó Barrientos.
Esto lo comparte Kriete, quien agregó que, si la autónoma cumple las fechas para modernizar y ampliar la terminal, el proyecto será exitoso, principalmente porque los pasajeros aumentarán en un 31 % al cierre de este año, según cifras oficiales de CEPA.
«Lo que se está haciendo es compatible con los planes de expansión y la consolidación de nuestro centro de conexiones. Ojalá se concluya en el menor tiempo posible para estar satisfechos», puntualizó el empresario aéreo.
Leyes son factor clave
Otro elemento fundamental para el crecimiento del sector aeronáutico del país es contar con incentivos y legislaciones para volver a El Salvador más atractivo, incluso como destino para transbordo.
En este sentido vuelos con escalas de entre 8 y 14 horas (conocidos como stop-over) le permitirá a las aerolíneas ofrecer un producto con valor agregado y contar con alianzas estratégicas con operadores turísticos para realizar visitas a diferentes lugares, ya sea playas u otros atractivos.
«Dar incentivos a viajeros de paso o a personas de negocios para que ingresen sin pago de impuestos al país y salgan en un plazo máximo de 12-14 horas generará un importante mercado turístico y muchas fuentes de empleo directas e indirectas. Pero esto necesita de leyes al respecto», recomendó Kriete.
Hay que recordar que el país recibe medio millón de pasajeros en transbordo cada año, lo cual refleja una importante demanda sin una oferta atractiva por parte de operadores turísticos…