La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés) recordó a las partes interesadas el papel fundamental que desempeña la aviación en momentos de catástrofes naturales y crisis humanitarias.
“En situaciones de emergencia, la aviación está ahí. La conectividad es esencial para hacer llegar ayuda humanitaria allí donde se necesita. La respuesta al reciente terremoto en el sur de Turquía y en Siria no es una excepción. Las aerolíneas han contribuido a salvar vidas en los primeros momentos tras el seísmo. Y continúan su labor humanitaria ayudando a acelerar la recuperación con el envío de mercancías vitales», dijo Willie Walsh, director general de IATA, durante el Simposio Mundial de Carga que se está celebrando en Estambul.
Aunque no existen datos pormenorizados de la ayuda que presta la aviación, un breve análisis de las 29 principales aerolíneas que operan en el mercado turco revela un esfuerzo de socorro extraordinario. Estas aerolíneas:
- han entregado más de 3.500 toneladas de ayuda procedente de más de 90 países;
- han realizado más de 350 vuelos de ayuda y retorno a las zonas afectadas;
- han transportado más de 130.000 personas de todo el mundo.
Entre los suministros de primera necesidad entregados destacan: ropa de invierno, mantas, aseos, artículos de higiene, alimentos, equipos para bomberos, generadores eléctricos, tiendas de campaña, equipos de distribución de agua, linternas, sacos de dormir y material médico, entre otros.
Airlink es un buen ejemplo de cómo el sector de la aviación responde a las crisis. Esta ONG coordina los recursos donados por las aerolíneas y las necesidades de otras ONG en tiempos de catástrofe humanitaria, como lo ha hecho durante la catástrofe en Turquía y Siria, donde ha coordinado el transporte de 1.000 toneladas de suministros de ayuda, con una reserva adicional de 300 toneladas.
La resiliencia de las ciudades y las infraestructuras son componentes clave de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU (SDG, por sus siglas en inglés, 9 y 11, respectivamente). Esta capacidad se pone a prueba en tiempos de crisis, cuando el papel del transporte aéreo es a la vez un componente esencial de la infraestructura por sí mismo y un salvavidas vital para las comunidades.
«Cada día, las aerolíneas hacen una enorme contribución a la humanidad conectando personas, culturas, empresas y economías. Esto fomenta el crecimiento económico y el desarrollo social. Cuando se produce una catástrofe, estos vínculos se vuelven aún más críticos. Todos los que trabajamos en la aviación estamos orgullosos de los suministros esenciales, el conocimiento especializado y la esperanza que los aviones llevan a las zonas afectadas. Por eso animamos a todas las partes interesadas a que se unan a nosotros para garantizar que la aviación pueda desempeñar este papel en un entorno cada vez más seguro, fiable y sostenible», declaró Walsh.
“Las aerolíneas muestran una compasión y solidaridad excepcionales, entregando suministros vitales y ayuda a las comunidades en situaciones de emergencia en todo el mundo. Durante las crisis, llevamos esperanza, socorro y ayuda, y nos esforzamos por reconstruir las comunidades entre todos. Estoy orgulloso de formar parte de una industria que marca la diferencia», afirmó Walsh.
