El debilitamiento de la economía china está repercutiendo en las aerolíneas del país que comienzan a afrontar una caída de la demanda en el mercado doméstico chino junto al aumento programado de capacidad, lo que está generando mayor competencia y una sobreoferta, a la que se suma la presión de otros modos de transporte.
China Southern Airlines, la mayor aerolínea comercial del país y la más centrada en el mercado nacional de las tres mayores aerolíneas chinas, ha reportado una sorprendente caída del 10% de la rentabilidad en el negocio de pasajeros en el primer semestre de 2013, según informa Aviation Week.
Portavoces de la compañía también han hecho referencia especialmente a que la competencia se ha vuelto aún más feroz en el sector, debido a la menor demanda coincidiendo con una cada vez mayor capacidad ofertada por la industria y la expansión de la red ferroviaria nacional de alta velocidad.
Air China, la aerolínea de bandera, segunda más grande y la operadora del país más orientada al mercado internacional, ha reportado una caída del 15% en el rendimiento de sus operaciones en el mercado nacional para el mismo período.
Guo Yufeng, analista de la consultora internacional de la industria ICF SH&E, ha apuntado que «la economía probablemente se ha reducido más rápido que lo que las líneas aéreas esperaban cuando realizaron sus pedidos de avione", según cita Aviation Week. Yufeng piensa que, para este año, las compañías aéreas chinas programaron su capacidad sobre la base de las previsiones de crecimiento económico realizadas por el gobierno central, que fueron optimistas. Las principales aerolíneas chinas están controladas por el gobierno central, dándoles un incentivo para seguir las recomendaciones oficiales en la planificación de sus operaciones.
El producto interno bruto (PIB) de China creció un 7,5 % entre los segundos trimestres de 2012 y este año 2013, muy por debajo de las tasas de 10 y 11% que había registrado hasta hace unos años "“ índices que se consideraba permanencerían estables por muy largo tiempo, a juicio de la mayoría de los economistas…