La Asociación Chilena de Líneas Aéreas (ACHILA) y la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), han hecho un llamado conjunto a las autoridades de gobierno para que intervengan de manera urgente, mediante el uso de sus facultades legales, en la adopción de las medidas necesarias para poner término inmediato a la movilización que afecta a los aeropuertos del país y que sigue causando un daño de enorme magnitud a decenas de miles de usuarios del transporte aéreo.
A pesar de que la DGAC anunció que la ralentización anunciada para hoy está detenida y que las negociaciones continúan, todavía no está clara la situación para los próximo días mientras las asociaciones gremiales se mantengan en estado de alerta.
Carolina Simonetti, gerente general de ACHILA, reiteró que “nuestro gremio estima absolutamente inaceptable que, frente a todo el país, un grupo de presión siga actuando ilegalmente, perjudicando a miles de personas que necesitan transportarse, manteniendo una paralización que está prohibida por la ley. Por ello, formulamos un llamado a las autoridades superiores del país, para que adopten medidas urgentes y eficaces para afrontar y resolver esta grave situación”.
Por su parte, la gerente general de IATA en Chile, Helen Kouyoumdjian, sostiene que las autoridades tienen la obligación de asegurar el desarrollo óptimo de las operaciones aéreas. «Las prácticas de paralización o ralentización como medida de fuerza que han venido afectado al transporte aéreo perjudican a miles de pasajeros que necesitan hacer uso de este servicio esencial, afectando algo tan necesario como es la conectividad del país”.
