El Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI) celebra que 2017 haya sido el mejor año en las terminales de Europa desde los últimos 12 años, desde que el sector recibió el impulso de la adhesión de diez países a la UE.
El tráfico de pasajeros en el conjunto de aeropuertos de la UE creció un 7,7% en 2017, frente al 6,7% de 2016. Entre las grandes terminales, la que más ha expandido sus operaciones ha sido la de Manchester (+8,6%), seguida por Ãmsterdam (+7,7%) y Barcelona-El Prat (+7,1%), que ha registrado 47 millones de pasajeros el año pasado.
El director general de ACI, Olivier Jankovec, dijo que la buena salud del sector aéreo tiene relación con el crecimiento económico de la región, que ha podido "desafiar los desafíos geopolítico" como el "brexit".
Desde 2012 el tráfico de pasajeros ha crecido un 30%, describió Jankovec, pero alertó que las instalaciones aeroportuarias y el personal están "recibiendo mucha presión", con "más y más aeropuertos que están alcanzando sus límites de capacidad, especialmente en las horas pico".
El aeropuerto más concurrido del continente, Heathrow, tiene en carpeta un ambicioso plan de expansión para poder mejorar sus servicios, tras haber recibido a más de 78 millones de pasajeros en 2017. El proyecto, que contempla la construcción de una tercer pista para vuelos de bajo coste, está siendo estudiando por el Gobierno británico, mientras el consorcio IAG "“integrado por British Airways junto con Iberia, Vueling y Aer Lingus- presiona para que se permita a las compañías privadas construir hangares en la terminal.
Crecimiento más lento
El directivo de ACI Europa confía en que a lo largo de 2018 el crecimiento seguirá su marcha, pero advierte que lo hará "a un ritmo más lento".
Uno de los factores que reducirán la expansión es el incremento del petróleo, "lo que está afectando a las aerolínea", describió, sobre todo a las de bajo coste que cuentan con márgenes de ganancias muy reducidos.
Otro es el impacto que puede tener el "brexit" en las operaciones entre Europa y el Reino Unido: este año los gobiernos deberían llegar a un acuerdo para que las aerolíneas británicas puedan operar en un espacio aéreo común. Pero si no lo hay, todas las licencias operativas garantizadas por la Autoridad Civil de Aviación británica (CAA, por sus siglas en inglés) no serán válidas para la UE, lo que significa que las compañías serán excluidas del mercado interior comunitario…