El ministro de Defensa de Brasil, Joaquim Silva, aseguró hoy que van bien las negociaciones entre la fabricante de aviones estadounidense Boeing y la brasileña Embraer, y que «al final, esto va a terminar en matrimonio».
En un acto en Sao Paulo, Silva no quiso pronunciarse sobre qué acuerdo pueden cerrar las dos empresas, tras varios intentos fallidos de unión en los últmos meses, pero dejó claro que las dos fabricantes de aviones «están cerca de llegar a un acuerdo».
Boeing anunció a finales del año pasado su intención de hacerse con Embraer, aunque el gobierno brasileño, que controla parte de la fabricante brasileña, se opuso al acuerdo, al no ver con buenos ojos que una empresa extranjera se hiciera con el control de Embraer, que juega un papel muy importante en el suministro de tecnología militar a las Fuerzas Armadas del país.
Tras la negativa del gobierno brasileño, Boeing intentó una compra parcial de la empresa brasileña, que no implicase los asuntos militares de Embraer, solamente los jets comerciales.
«No me preguntan qué tipo de boda, ya sea con la plena comunión de bienes, separación total o parcial de las mercancías», bromeó el ministro brasileño, quien admitió que una posible alianza entre las dos compañías podría ayudar a Embraer a vender su KC-390, el nuevo avión de carga militar brasileño.
El interés de Boeing en Embraer apareció tras la compra de la canadiense Bombardier por Airbus, las otras dos grandes fabricantes de aviones mundiales. Bombardier es la segunda mayor constructora de aviones de hasta 150 plazas, apenas superada por Embraer…
