Tras la firma del Acta de Acuerdos (Acta) entre Lima Airport Partners (LAP) y el Ministerio de
Transportes y Comunicaciones (MTC) con respecto a la ampliación del Aeropuerto Internacional Jorge
Chávez (AIJCH), realizada el 29 de abril de 2022, los operadores aéreos representados en su conjunto
por IATA, ALTA, AETAI y APEA desean expresar lo siguiente:
– Buscando el beneficio máximo de todos los usuarios del transporte aéreo y la conectividad del
país, respaldamos el pedido de la Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional
(AETAI), para que la Contraloría General de la República (Contraloría) tome una postura
concluyente frente al Acta que modificaría el contrato adjudicado a LAP, permitiéndole
operar con dos terminales en el Aeropuerto de Lima, sin seguir los procedimientos legales
correspondientes.
– Recordemos que cualquier modificación al Contrato de Concesión debe cumplir con
requerimientos mínimos legales, tales como la opinión favorable de los órganos competentes en
la materia: la DGAC, Contraloría, el Ministerio de Economía y Finanzas, OSITRAN y,
eventualmente PROINVERSIÓN. Sin embargo, al ser inexistentes, en este momento hacen
inviable la modificación actualmente propuesta a través de un acta, la cual por sí misma, sería
nula.
– En el 2001, LAP ganó la adjudicación del aeropuerto con la propuesta de un nuevo y único
terminal, destacando los beneficios de integrar las operaciones aeroportuarias en una misma
infraestructura a diferencia de operar con dos o más terminales. Dicho factor de competencia, que
favoreció a LAP en su momento, solo puede ser modificado a través de un proceso formal y de
ninguna manera a través de un Acta.
– LAP pretende justificar la modificación expuesta, tratando de supeditar la ampliación al crecimiento
de la demanda de pasajeros. Al respecto, recordamos que ello es ilegal y contrario al Contrato de
Concesión, ya que el propio contrato señala que se trata de una mejora obligatoria que debe
efectuarse “sin tener en consideración el volumen de tráfico o cualquier otro factor”. A esto hay que
sumar que los beneficios destacados por LAP en su momento e incluidos en el Anexo 6 del
Contrato de Concesión hoy son ignorados con la nueva propuesta de operación dual.
– Sobre ello, incluso los organismos técnicos expertos (MTC, OSITRAN y la DGAC) en su momento
desmerecieron la solicitud de LAP de modificar el nuevo y único terminal aéreo por dos terminales
modulares, sustentando su rechazo en que esto no estaba contemplado en el contrato de
concesión y que tampoco generaba de ninguna manera un mayor beneficio a los usuarios
del principal aeropuerto del Perú.
– La intervención de la Contraloría será clave para poder responder ante la opinión pública sobre la
legalidad del Acta suscrita entre LAP y el MTC, donde el único beneficiario sería LAP. La
Contraloría tiene la responsabilidad de evitar un desastroso perjuicio al interés público, el
cual requiere urgentemente una reactivación económica, productiva y turística completa; y no la
modificación perjudicial de un proyecto que viene rezagado sobre un aeropuerto que nos pertenece
a todos los peruanos y que, de ser aceptada, nos afectaría con una operación bastante más
compleja y menos eficiente, con un nuevo terminal de menor capacidad hasta el 2035,
relegándonos en el intento de ser el hub principal de América Latina, uno de los objetivos que se
buscaban con el contrato original.