La aerolínea australiana Qantas está ampliando el uso de combustible de aviación sostenible (SAF) al aprovechar los suministros en California para ayudar a reducir las emisiones de carbono en sus vuelos desde Los Ángeles y San Francisco a Australia.
SAF produce hasta un 80% menos de emisiones que el queroseno de reacción tradicional y es compatible con las aeronaves existentes. Las aerolíneas de todo el mundo están aumentando su uso de SAF, con una demanda que supera la oferta en la mayoría de las jurisdicciones.
La compañía estadounidense de biocombustibles Aemetis suministrará casi 20 millones de litros de SAF mezclado cada año para los vuelos de Qantas, a partir de 2025. El combustible sostenible se producirá en la planta de Aemetis actualmente en desarrollo en Riverbank, California. Provendrá de materia prima certificada de productos de desecho que luego se mezclan con combustible para aviones normal.
Esta es la segunda gran compra offshore de SAF de Qantas con vuelos desde Londres utilizando una mezcla de combustible sostenible desde principios de este año.
Qantas está buscando una serie de acuerdos adicionales para agregar más SAF en los Estados Unidos y otros aeropuertos internacionales. El transportista nacional apunta a ser neutral en carbono neto para 2050 y esbozará un objetivo provisional a finales de este mes.
El CEO de Qantas Group, Alan Joyce, quien se reunió con ejecutivos de Aemetis en Los Ángeles, dijo que los combustibles sostenibles eran fundamentales para la transición de la aviación a un futuro de bajas emisiones. «El cambio climático está en la mente de Qantas, nuestros clientes, empleados e inversores, y es un enfoque clave para nosotros a medida que avanzamos en nuestra recuperación de la pandemia», dijo Joyce.
«Operar nuestros aviones con combustible de aviación sostenible es lo más importante que podemos hacer para reducir directamente nuestras emisiones. Estamos buscando activamente obtener combustible de aviación sostenible para nuestras operaciones, y el acuerdo que anunciamos hoy es uno de los muchos que haremos a medida que el mercado se ponga al día con la demanda a nivel mundial”, añadió.
«Por el momento solo podemos comprar combustibles sostenibles en alta mar. Los Estados Unidos, el Reino Unido y Europa tienen industrias que se han desarrollado con mucho apoyo gubernamental porque este es un campo nuevo y los beneficios a largo plazo para esos países son obvios. Qantas ya ha comprometido 50 millones de dólares para apoyar el desarrollo de una industria saf en Australia, y seríamos su mayor cliente. Además de los beneficios ambientales y económicos, una industria local de SAF reduciría la dependencia de la nación de los combustibles importados. Por ahora, SAF es más caro que los combustibles fósiles tradicionales, pero con la inversión adecuada podría crecer a una escala en la que el coste esté a la par», agregó Joyce…