Ahora que se aproxima el Mundial de Fútbol y muchos que viajan a Brasil quieren aprender portugués para estar a tono con el evento, hay que tener presente que algunas palabras, aunque suenen parecido en español, no significan lo mismo.
Varios profesores de idiomas consultados por la BBC señalaron que debido a la proximidad de la gesta deportiva, muchas personas en Colombia, Chile, Argentina y Uruguay están tomando cursos para aprender el idioma, o aunque sea, algunas palabras para poder hacerse entender mientras están en suelo brasileño.
Por ello las clases se orientan a cosas básicas como pedir información en un hotel y sobre todo, tener clara esas «trampas» entre el español y el portugués.
María Marta Santa María, quien vivió en Río de Janeiro y ahora enseña portugués en Argentina, aprovechó el clima del Mundial para crear un curso llamado «Portugués para el Mundial» con un capÃtulo especÃfico para cada sede del evento.
Y da el ejemplo de una ciudad como Fortaleza: «Se da la situación de que un argentino necesita cambiarle la llanta al carro que alquiló. Un brasileño le preguntará si necesita de una ‘borracharia’ (neumático) y los argentinos responderán que ellos no están ‘borracho"™. Este es un tÃpico caso de lo que se llaman «falsos amigos» entre el portugués y el español».
La «taza» se mira, pero no se toca
Otro buen ejemplo de estos «falsos amigos» sucede cuando un brasileño llega a Buenos Aires y pide una «taza (copa) de vino». La palabra taza significa copa en portugués, mientras que taza en español es un recipiente de cerámica.
A la hora de pagar también se presta para confusiones. En Brasil seguramente le pedirán a la hora de cancelar una compra que pase su «cartón» de crédito. Es posible que la gente quede un poco confundida hasta que comprenda que «cartón» significa «tarjeta» y no el material que sirve para hacer cajas.
La clases también han servido para revivir rivalidades en el campo de juego entre brasileños, uruguayos y argentinos.
Por ejemplo, los alumnos argentinos se divierten con los anuncios publicitarios que exploran la rivalidad legendaria entre brasileños y argentinos.
«Me parece que los brasileños consideran mucho más a los argentinos como rivales que a la inversa», dice Gabriela Holtz, quien vive en Buenos Aires hace 18 años y trabaja como asesora del centro de idiomas «Verde e Amarelo».
Por supuesto, en las aulas uruguayas o fuera de ellas, ellos «adoran hablar sobre el Maracanazo», en referencia a la victoria de Uruguay sobre Brasil en el Mundial de 1950.
Recientemente una marca deportiva lanzó un anuncio publicitario en el que mostraba a un fantasma vestido de azul celeste (el color de la camiseta uruguaya), asustando a los miembros de la selección brasileña.
Pero van más allá. Hace pocos días se estrenó el documental «Maracaná, la película», que reunió para su estreno a 10.000 personas para su estreno en el estadio Centenario de Montevideo.
En la capital uruguaya, el profesor del Instituto de Cultura Uruguayo-brasileño, Rafael López, organizó un curso llamado «Prepárate para el Mundial», que pretendía preparar a los hinchas que deseaban asistir a la Copa del Mundo.
Como el curso en Buenos Aires, los uruguayos aprendieron frases básicas sobre cómo pedir ayuda en el aeropuerto o en la entrada al país (muchos de ellos planean llegar a Brasil en carro) y por supuesto, palabras relacionadas con el Mundial.
«Les mostramos reportajes de la TV brasileña donde explicábamos esas diferencias. Por ejemplo, «exquisito» para…