Durante 2023, las afectaciones de rayos láser alcanzaron cifras récord, superando todas las estadísticas previas.
La Administración Federal de Aviación (FAA) registró un total de 13,304 informes de pilotos sobre estos sucesos, representando un incremento del 41% en comparación con el año anterior.
El acto de dirigir un láser hacia una aeronave se presenta como una amenaza significativa para la seguridad aérea.
Diversos tipos de láseres de alta potencia tienen el potencial de incapacitar a los pilotos, muchos de los cuales operan aviones con una capacidad de transporte de cientos de pasajeros.
Desde que la FAA comenzó a recopilar datos sobre impactos de láser en 2010, los pilotos han reportado un total de 313 lesiones.
«La FAA está comprometida a mantener el sistema de transporte aéreo más seguro del mundo. Apuntar con un láser a una aeronave representa un grave peligro para la seguridad, poniendo en riesgo a todos a bordo y en tierra», expresó Michael Whitaker, administrador de la FAA.
Aquellos que dirijan rayos láser hacia aeronaves enfrentarán sanciones económicas por parte de la FAA, de hasta 11,000 dólares por infracción y hasta 30,800 dólares por incidentes múltiples.
Además, los infractores podrían enfrentar acciones legales por parte de las fuerzas del orden federales, estatales y locales.
Whitaker enfatizó la importancia de la educación, la divulgación y la colaboración pública para abordar este riesgo para la seguridad. Instó a la comunidad a informar sobre ataques con láser a la FAA a través de su sitio web.
