Para la mayoría, viajar se traduce en felicidad plena. La oportunidad de probar nuevas actividades, practicar deporte, disfrutar de sus aficiones, probar nuevas especialidades gastronómicas, pasar tiempo con familia y amigos o simplemente descansar. Pero un nivel de expectativas tan alto también puede convertirse en una fuente de estrés. En una encuesta realizada por KAYAK sobre los hábitos de viaje, el 18 % de los encuestados afirmaba haber sentido estrés en algún momento en relación con la planificación de sus viajes y el 17 % cuando ya está llegando al destino de sus vacaciones.
La encuesta recaba la opinión de 23.400 viajeros de 22 países.
Las principales fuentes de estrés a la hora de viajar.
Viajar en grupo
Cumplir con todas las expectativas vacacionales es todo un reto, y más cuando se viaja en grupo. La encuesta realizada entre viajeros muestra que entre las principales fuentes de agobio están la planificación de los itinerarios (38 %), la coordinación de planes y actividades durantes las vacaciones (35 %), así como mantener al grupo de viaje contento (29 %).
Costos
A la hora de viajar, el viajero es sensibles a los precios. Así lo ponen de manifiesto los encuestados cuando indican que las cuestiones financieras son uno de los aspectos del viaje que más estrés generan (34 %). Esta consideración es aún más apremiante al viajar solo.
Hacer colas
Una vez empezado el viaje, se suman nuevas fuentes de estrés en el mismo aeropuerto. El retraso del vuelo supone una principal fuente de estrés para los viajeros consultados (35 %) así como las interminables colas durante las vacaciones (35 %).
Coger un vuelo tiene asociados varios momentos críticos que van desde los trayectos al aeropuerto a los retrasos en los vuelos, pasando por las colas y el agobio de llegar a tiempo a la puerta de embarque. Todo esto unido supone una fuente de estrés para el 69 % de los viajeros…