“El aeropuerto está bien, pero hasta ahora no funciona. Así nomás lo han dejado, no sabemos por qué. Nosotros quisiéramos que funcione, por los menos que pare un avión”, lamentó Martha Mayda, pobladora del municipio paceño de Copacabana.
La nueva terminal aérea turística Tito Yupanqui en esa comunidad fue inaugurada hace más de cuatro meses, pero hasta la fecha está vacía, sin operar y sin funcionarios.
Los pobladores de Copacabana fueron parte de la celebración el pasado 11 de julio cuando el presidente Evo Morales llegó a este aeropuerto en un avión de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) para inaugurar la terminal. Hoy, ellos se muestran decepcionados y lamentan que todavía no haya vuelos.
“No está funcionando y ya la preocupación es latente de toda la población porque tenemos un aeropuerto que se está quedando como un elefante blanco”, manifestó el presidente de la zona de Munaypata, Claudio Soraide. Además, aseguró que las autoridades municipales no se movilizan para ayudar en su funcionamiento.
Los turistas que llegan a conocer el lago Titicaca y la imagen de la Virgen de Copacabana no tienen conocimiento de la existencia del aeropuerto. La chilena Constance Foyth llegó directo al aeropuerto de la ciudad de El Alto y viajó en minibús hasta el municipio. “Sería interesante poder llegar directo acá (al lago)”, comentó.
El peruano Cristian Flores, que llegó al lago hace varios días, camina por las calles ofreciendo manillas y collares, pero nunca escuchó de esta terminal aérea.
Página Siete visitó las instalaciones del aeropuerto y pudo constatar que no hay ningún funcionario en las salas, sólo un sereno que ronda el lugar todos los días. Desde su inauguración hasta hoy ni un avión comercial arribó a Copacabana.
Las instalaciones están en perfectas condiciones, pero despobladas. Una caseta de peaje completamente vacía es lo primero que se observa al ingresar a este sitio. Luego de caminar unos pasos, se ve el parqueo perfectamente pintado y delimitado, al igual que la calle, pero sin vehículos.
Adelante, la terminal tiene dos puertas (una de entrada y otra de salida), ambas de vidrio pero con llave, sin paso para nadie. Pese a la desolación, las instalaciones están relucientes cual auto nuevo. De la misma forma, las pistas de aterrizaje y de embarque tienen un asfalto impecable, lo que confirma que nunca más, desde la llegada del Presidente en julio, fueron usadas.
Las dudas se apoderan de los lugareños. ¿Por qué aún no funciona? ¿Falta algo?, son las interrogantes que muchos de ellos se hacen al conocer la situación de la infraestructura.
El único ruido que se escucha es el cantar de las aves, el mugir de las vacas, el rebuznar de los asnos y otros animales de los comunarios que pastan alrededor del cerco.
Según la presidenta del Comité Cívico de Copacabana, Blanca Quispe, la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (Aasana) inspeccionó el lugar y aseguró que se encuentra totalmente equipado y listo para funcionar. Mencionó que el administrador de la entidad pidió al municipio hablar con la ministra de Culturas, Wilma Alanoca, y con las empresas aeronáuticas para que el aeropuerto funcione lo antes posible.
El Comité Cívico de ese municipio envió notas al Ministerio de Culturas y Turismo y al Viceministerio de Turismo en las que se les pide “que por la unidad de promoción turística se coordine para la operación de servicios de aeronaves en el aeropuerto Tito Yupanqui de Copacabana”. La carta menciona que la población se encuentra a la espera de que la terminal entre en servicio.
Otra carta fue enviada al presidente Evo Morales a través de la cual se le solicita, además, coordinar con otras empresas aéreas para que el aeropuerto funcione. Las notas fueron remitidas el 5 de noviembre y hasta la fecha el municipio no tiene respuesta.
Quispe aseguró que Perú también está interesado en el funcionamiento del aeródromo. “Ellos, muy esperanzados, nos dicen: ‘ya tienen su aeropuerto’. En agosto los hermanos peruanos son más devotos de la Virgen de Copacabana. Vienen de diferentes lugares, hasta traen en silla de ruedas a los enfermos”, mencionó.
El alcalde de Copacabana, Félix Pedro Nina, aseguró que la terminal aérea no cuenta con un surtidor de combustible. “Entonces, las condiciones para el funcionamiento y para que puedan llegar los vuelos faltan. Las condiciones se tienen que cumplir”, apuntó la autoridad municipal y mencionó que el equipo de abastecimiento tendría un costo adicional de cinco a siete millones de bolivianos. Sin embargo, aún no hay gestiones para adquirir los equipos.
Nina no dio más detalles al respecto y responsabilizó sobre el funcionamiento de la terminal aérea a Aasana. Página Siete envió una carta a esta institución con preguntas sobre esta terminal aérea, pero no hubo respuesta hasta el cierre de esta edición…
