Definitivamente, los nuevos aviones serán totalmente inteligentes, aunque en ocasiones no sepamos muy bien para qué servirá tanta inteligencia. Por ejemplo, los nuevos A350 de Airbus van a recoger información sobre el tiempo que el viajero está en los lavabos del avión o su consumo de papel. Es la introducción del “Internet de las cosas” en la aviación, que proporcionará cantidades ingentes de conocimiento a las empresas operadoras de los aviones.
Airbus llama a esta recogida de material como el “Airbus Connected Experience”, que permitirá disponer de un conocimiento amplio de lo que hace el avión, sus tripulaciones, y sus pasajeros. De ahí, las cámaras de televisión que tienen los asientos para filmar a los pasajeros.
Una novedad sencilla será que una luz advertirá a los tripulantes de si algún pasajero no tiene el cinturón abrochado en los momentos en que eso es requerido.
Según la compañía fabricante, la información digital será útil para saber cuánto jabón poner en los lavabos, y para saber cuánto papel higiénico queda aún disponible. Tal vez, en una aerolínea low-cost se les puede ocurrir generar un cargo electrónico en la tarjeta de crédito asociado al consumo de cualquiera de los productos que ofrece el avión.
La explicación dada por el fabricante también alude al medio ambiente, porque este conocimiento podría permitir alguna optimización del uso de los equipos del avión.
Un poco más útil puede ser la digitalización de los carritos de comida que usa la tripulación para ofrecer servicio a los clientes…
Imagen: TripGlobally Dot Com