Esta mañana se realizará una de las consultas para el Plan Nacional de Desarrollo en el rubro de transporte aéreo. Se antoja un poco apresurado convocar a tantos interesados en el tema a unas mesas que tendrán un tiempo máximo de dos horas, en asuntos tan importantes como el Desarrollo Económico y la Aviación. Pareciera que de lo que se trata es de cubrir el expediente. Ojalá que no sea así.
Lo cierto, sin embargo, es que el sector atraviesa una de sus crisis más profundas. Tenemos, por un lado, un proceso de Concurso Mercantil en Mexicana de Aviación, una empresa "emblemática" (Peña Nieto dixit), abierto desde hace más de 30 meses y que no ha caminado por múltiples razones. Tal vez la razón más importante es porque no hay voluntad política para que avance.
Un ejemplo de ello es la información que se difundió la semana pasada respecto a la supuesta resolución del tribunal colegiado para "levantar la suspensión del procedimiento" y continuar con los trámites del juicio. La resolución sí existió, el asunto es que no se refería a Mexicana de Aviación, sino a Aerovías Caribe, o Mexicana Click, la empresa alimentadora de aquélla.
Otro dato es que la suspensión del procedimiento fue solicitada por Aeropuertos y Servicios Auxiliares y por el Aeropuerto de la Ciudad de México, ambas dependencias gubernamentales que "”supuestamente"” ya habían llegado a un acuerdo para otorgar plazos y precios de los adeudos adquiridos por dicha empresa.
Curiosas resultan ambas cosas: el actual gobierno ha dicho que "sería respetuoso de los tiempos y procesos judiciale" y el haber pedido dicha suspensión habla de una participación activa de las dependencias de gobierno, con todo y directivos incluidos; además de que el gran despliegue que se le dio a la información habla de una muy clara intención de acelerar los tiempos para que se declare una quiebra.
Hay quien piensa que la quiebra es lo mejor que le podría pasar a Nuevo Grupo Aeronáutico, hay quienes pensamos que antes de resolver cualquier cosa habría que clarificar el proceso y castigar a los responsables de los quebrantos. En cualquier caso es mejor la transparencia.
Lo que más ha dañado la imagen de los gobiernos y de los políticos es que declaran una cosa y hacen otra, con lo cual contribuyen a la opacidad y a que quienes han incurrido en delitos se oculten y sigan impunes.
Si de verdad se cree (y suponemos que así debería ser vistos los ejemplos de otros países más desarrollados que el nuestro) que la aviación debe ser un sector estratégico y prioritario, herramienta de competitividad, generador de ingresos y divisas, multiplicador de empleo y de oportunidades de negocio. Si es verdad que el país quiere jugar en las grandes ligas con prestigio propio y promover el desarrollo regional al interior, crear nuevas oportunidades para todos y generar valor agregado, entonces la ruta es por la transparencia y por la conservación de las fuentes de empleo.
Esta ruta pasa también por explicitar las intenciones del gobierno y ser consistentes con las promesas de campaña. Lo peor, en todo caso, es declarar una cosa y en los hechos, hacer lo contrario.
Por lo pronto, hoy mismo estarán en las oficinas de la PGR representantes de los diversos sindicatos con los cuales Mexicana tenía contratos. Ojalá que el Procurador Murillo Karam entre de lleno al asunto.
Lo oà en 123.45: Por el lado de Aeroméxico se empieza a gestar una lucha que "”esperemo"” no escale más allá de lo normal. Y es que, en vísperas de la revisión del Contrato Colectivo de Trabajo entre la aerolínea y el sindicato de sobrecargos, la empresa planteó una alternativa para la contratación de nuevos sobrecargos para esta troncal en un régimen diferente y menos oneroso.
El asunto es que ASSA no ha respondido a esta solicitud y, por el contrario, en el marco de la revisión contractual envió un pliego petitorio que va en sentido contrario y que involucra más sueldo y más contrataciones en el esquema actual de itinerarios. Ya tendremos oportunidad de reseñar el asunto, pero mientras tanto la aerolínea ha recurrido ante las autoridades para plantear un Conflicto de Naturaleza Económica, lo cual, desde luego, augura que la discusión se dará en otro ámbito y tal vez en medio de un conflicto. Esperamos, de corazón, que la sangre no llegue al río y que se encuentren vías de diálogo y solución pacÃfica y equilibrada para todos. Por el bien de la aviación mexicana.