The Boeing Company ha anunciado unos ingresos para el primer trimestre de 22.900 millones de dólares con un beneficio por acción (según PCGA) de 3,75 dólares y un beneficio por acción recurrente (no-PCGA)* de 3,16 dólares, que refleja la reducción en las entregas del 737 compensada parcialmente con un mayor volumen en defensa y servicios (Cuadro 1). Boeing generó un flujo de caja operativo de 2.800 millones de dólares y repartió 1.200 millones de dólares en dividendos.
Las previsiones financieras para 2019 publicadas anteriormente no reflejan el impacto del 737 MAX. Debido a la incertidumbre en torno a las fechas y las condiciones de la vuelta al servicio de la flota del 737 MAX, se publicarán nuevas previsiones en próximas fechas. Boeing está avanzando a buen ritmo hacia la certificación final de la actualización del software del 737 MAX, habiendo completado más de 135 vuelos de prueba y de producción con el software actualizado. La compañía sigue trabajando conjuntamente con los reguladores globales y con nuestros socios, las aerolíneas, para probar el software de forma exhaustiva y completar un paquete sólido de recursos de formación y entrenamiento.
«En toda la compañía, estamos centrados en la seguridad, la vuelta al servicio del 737 MAX, y en ganar y recuperar la confianza de clientes, reguladores y pasajeros», declaró Dennis Muilenburg, Presidente del Consejo de Administración, Presidente Ejecutivo y Consejero Delegado de Boeing. «A medida que trabajamos para superar esta etapa difícil para nuestros clientes, nuestros socios y nuestra empresa, nuestra atención sigue fijada en la excelencia en materia de calidad y desempeño, así como en la gestión de un negocio robusto con un crecimiento sostenible sobre fundamentos sólidos a largo plazo.»
Hitos notables del trimestre a nivel operativo incluyen importantes éxitos en defensa, el sólido comportamiento de los aviones comerciales de fuselaje ancho y su registro de pedidos, la continuación del crecimiento robusto en servicios, y la obtención de la aprobación de los accionistas para la alianza estratégica con Embraer.
El flujo de caja operativo del trimestre, que se situó en 2.800 millones de dólares, reflejó principalmente la caída en las entregas del 737 y el calendario de cobros y pagos. La compañía también repartió 1.200 millones de dólares en dividendos en el trimestre, un aumento del 20% del dividendo por acción comparado con el mismo periodo del ejercicio anterior. La compañía recompró 6.100 millones de acciones por importe de 2.300 millones de dólares en el trimestre, todo antes de mediados de marzo.
La cartera de pedidos de la compañía al final del trimestre se mantiene robusta en 487.000 millones de dólares.
Commercial Airplanes
Los ingresos de Commercial Airplanes en el primer trimestre se elevaron a 11.800 millones de dólares por el menor número de entregas del 737, compensado por el mix favorable. El margen operativo del primer trimestre fue del 9,9%, lo que refleja el menor número de entregas del 737, compensado parcialmente por el mayor margen en el programa 787. El margen también refleja el aumento de los costes asociados al ajuste reciente del ritmo de producción del 737.
Durante el trimestre se entregaron 149 aviones, y el ritmo de producción del 787 se incrementó hasta 14 aviones mensuales. Commercial Airplanes captó varios pedidos de aviones de fuselaje ancho durante el trimestre, incluidos 18 777X para IAG, la matriz de British Airways, 20 787 para Lufthansa, y 10 787 para Bamboo Airways. La primera unidad de pruebas del 777X salió de fábrica y el programa está encaminado para realizar las pruebas de vuelo este año y hacer la primera entrega en 2020.
La cartera de pedidos de aviones comerciales se mantiene fuerte, con más de 5.600 aviones valorados en 399.000 millones de dólares.
Previsiones
Las previsiones anteriores para 2019 no reflejan el impacto del 737 MAX. Debido a la incertidumbre en torno al calendario y las condiciones de la vuelta al servicio de la flota del 737 MAX, se publicarán nuevas previsiones en próximas fechas.
